Esta increíble imagen fue tomada en Rusia. Allí, dos niños intentan cruzar la calle por la senda peatonal y ocurrió lo peor: apareció un individuo a bordo de una motocicleta y barrió a uno de ellos.

Afortunadamente, el hecho no pasó a mayores y no hubo que lamentar víctimas fatales. Esto es una muestra clara de que el exceso de velocidad, por mucho que se intente una maniobra a último momento, de poco sirve.