En medio de una sesión de fotos de Angeline, una mujer embarazada, apareció una criatura marina que muchos se percataron analizando las imágenes que se viralizaron en poco tiempo. Había una acompañante. Se trataba de un delfín, que decidió saltar en una de las distintas capturas de ese momento.

El particular caso  ocurrió en Jacksonville, Florida, en donde decidieron criar juntos a su próximo bebe.

Ante un clima ideal y una playa prácticamente vacía, Angeline se concentró en posar ante la cámara, siempre con el mar a su espalda. Nunca se distrajeron, mientras los bañistas vivían un verdadero espectáculo.

Días después, cuando Dan empezó a revisar las fotografías tomadas en la playa para elegir las mejores, se dieron cuenta del espectáculo del que fueron parte sin saberlo. La foto fue compartida por miles de personas en Facebook.