Algunas estimaciones indican que existen 200 millones de insectos por cada ser humano. Por eso, la vida de estos diminutos seres vivos es un constante descubrimiento todos los días, tanto para el común de las personas como para los biólogos más especializados.

Uno de los insectos más llamativos, tanto por su anatomía como su color, es la famosa mantis religiosa cuya característica principal es ser una gran depredadora y que puede llegar a devorar animales mucho más grandes que ella. Lo más espeluznante: la mantis religiosa siempre come primeros los cerebros de sus presas y tiene prácticas canibalísticas.

El canal de YouTube InsecthausTV subió un video que genera sensación entre los aficionados del mundo de los insectos. En él, se ve como el “tatadiós” ataca a una langosta, la mata al instante y comienza "a disfrutarla”. Es una filmación de cámara rápida de tres minutos, se resumen las tres horas que tardó en finalizar el otro insecto de manera completa, tan solo dejando unas extremidades tiradas.

Con más de 2.600.000 de reproducciones y 43.000 likes, el video viral se convirtió en tendencia, ya que se ve as la perfección como el voraz insecto se desenvuelve en el momento de comer y los curiosos debaten sobre este misterioso invertebrado.

Finalizado el almuerzo, a la mantis se la ve con el estómago lleno y con el corazón latiendo por esa hinchazón.

A la mantis religiosa se la conoce popularmente como “santateresa”, “mamboretá”, “campamocha” y “tatadiós”. La caracterización de “religiosa” nace por la posición de las patas delanteras que parecieran que está en una pose de “rezo”. No obstante, sucede todo lo contrario debido a que son sus armas de ataque.

La mantis es un potente depredador cuya dieta es totalmente carnívora y no discrimina a otros miembros de su propia especie como arañas, grillos, saltamontes y escarabajos.

Además, puede comer ranas pequeñas, crías de lagarto, peces pequeños, serpientes pequeñas e incluso colibríes que lo duplican en tamaño. Una vez que caza a su presa puede pasar horas comiéndosela y hasta días, si tiene un tamaño muy superior.

Otra gran característica es su posibilidad de camuflarse. Su color verde estridente se asemeja al de las hojas de la mayoría de los árboles y otras, si no tienen bien desarrolladas sus alas, se pueden camuflar con ramas y tallos.

El “mamboretá” es un insecto solitario, que solamente se aproxima a otros en época de apareamiento. La hembra segrega feromonas para atraer al macho y la cópula dura un par de horas. En este contexto, las hembras se vuelven agresivas y pueden llegar a matar y devorarse a su macho una vez finalizado el acto de reproducción.