En México, una familia participaba del bautismo de una nena llamada Magdalena y felices por este acto filmaban todo lo que sucedía. 



Al momento de ser bautizada, y cuando el sacerdote a cargo le estaba mojando la cabeza, la pequeña comenzó a gritar "¡Déjenme!, ¡Déjenme!", mientras era sostenida por ambos padres, mientras que de un momento a otro cuando escuchaba las palabras del religioso le dijo ¡Put...! y luego insistió: ¡Put...!.  



Rápidamente tanto la mamá como el papá intentaron literalmente taparle la boca y hacer que pare de decir groserías pero lo único que la detuvo fue la finalización del momento. 



Más tarde, el video se viralizó en redes sociales recibiendo millones de visitas y comentarios tanto a favor como en contra.