"Venimos a pasarla bien. Serán dos horas de música al palo, con un repaso por los clásicos y las últimas canciones para cantar, saltar y transpirar", señaló a DIARIO DE CUYO, "Corvata" Corvalán, voz líder de la banda Carajo. Si bien, este año compondrá puertas adentro para un nuevo álbum en 2016; la agrupación retorna mañana a San Juan para tocar en la Sala del Sol (ver aparte).
El grupo aterrizará después de su última actuación en la provincia, el 12 de octubre de 2013 en Hugo, cuando presentó el disco doble Frente a Frente.
"Queríamos ir porque allá somos una gran familia, como en todo el país. No hay mejores ni peores", aseguró el cantante y bajista.
– No lo tomo como algo tan personal. Está bueno que esas canciones vuelvan a ser escuchadas, se puedan tocar en vivo y la gente las disfrute. Hay una parte de ese espíritu de la banda que todavía los chicos disfrutan. Los músicos dejamos nuestra historia en las canciones, mientras estén vivas la gente va a recordarnos. De alguna manera, me siento feliz.
– Con ANIMAL hay respeto, pero nada más, cada uno siguió su proyecto. Lo mejor, para los viejos seguidores de ambas bandas, es que nuestro género siga creciendo y surjan nuevas propuestas de heavy rock, porque sabemos que no es uno de los estilos más populares.
– En 2001 arranqué con Carajo al 100 por ciento con el baterista Andrés Vilanova -NdR: hijo de Botafogo- que estuvo en ANIMAL en los 2 últimos discos, y Hernán Terry Langer.
– Por una cuestión de respeto, elegimos empezar de cero.
– Todo tiene que ver más que nada con el desgaste, las relaciones humanas y el no encontrar una solución inmediata; y decidí hacerme a un costado.
– Sí, pero uno a veces tiene que ceder, no me gusta imponer nada. Como pasa en las grandes familias, lamentablemente, hay diferencias. Pensé en lo mejor para los fans que habían puesto tantos anhelos en nosotros.
– Es más universal. Es el mismo mensaje de lucha y de resistencia, de unidad, de que todos somos iguales aunque nos dividan banderas y estilos sociales. El ser humano es uno. Empezamos con la defensa de los pueblos originarios en ANIMAL y se expandió a todos los que quieren hacer el bien y repudian la maldad social con Carajo. Hay muchos chicos que tienen una vida dura, traen tristezas y frustraciones. La idea es que nuestra música los consuele. Es un cable a tierra para descargar y dejar lo malo atrás.
– Un poco sí, pero no somos una banda con una identidad militante definida. Creemos en la justicia y en los hombres de bien que tienen la oportunidad de llegar a ciertos grados de poder y que defienden la verdad y tratan de llevarlo a cabo. Hoy en día, sabemos que es muy difícil porque la corrupción es la que gobierna y domina, y los hombres de ley que toman el poder son echados a un lado y asesinados, por decir así.
– Si vamos a pelear tenemos que saber por qué, el tema es que hay mucha confusión, pancarta, frase hecha y mensaje disfrazado de que venden algo bueno y sólo buscan cubrir los intereses de algunos pocos; los chicos deben saber discernir lo bueno de lo malo, leer entre líneas y la letra chica.
– Hoy, hay bandas divididas por estar en contra o a favor del Gobierno actual… ¿Es correcto utilizar el arte para hacer política?
– La libertad del artista está en poder manifestarse. Las canciones son nuestro testamento, es reflejo de lo que uno piensa, siente y ama.
– Tratamos de agradecer la alegría de poder hacer lo que nos gusta, animarlos a luchar por los sueños, a no tener miedo.
– La diferencia está en vivir físicamente y en animarse a vivir; a no tener miedo a fracasar. Tomar valor, tener coraje.
– Nos gusta jugárnosla. No es que, ahora que somos conocidos, no nos vamos a dormir en los laureles. Tenemos el doble o el triple de compromiso. Siempre estamos ocupados, pensando en lo que va a venir, en nuevos discos, en tratar de mejorar de manera individual. Si nos equivocamos es parte del proceso de crecimiento. Para nosotros el fracaso sería rendirnos.

