La "Enana" Feudale no tiene pelos en la lengua. Al menos, se los depiló para revisionar su trabajo y hablar de Tinelli con DIARIO DE CUYO -discurso casi obligado pero que no la incomoda porque "hay una carrera propia detrás", destacará-. La voz engolada de risa retumbante y que dice "enseguida volvemos con Showmatch", depuró sus pensamientos y aseguró que su jefe no es un ideal -"los hombres perfectos no deberían tener mal humor", ironizó segura- y consideró que el polémico ciclo "no violenta a la gente". "Lo que se ve en Showmatch no es lo que Showmatch produce sino lo que refleja en una sociedad en crisis", reflexionó.
– Más de 20 años conviviendo con picos de rating ¿Te genera alguna presión o todo bien con la fama?
– Ningún problema. Tampoco es una popularidad que me inhiba moverme con tranquilidad por las calles. Es una cosa muy reposada. La gente no se amontona cuando paso (risas).
– Si Mirtha le entregó su vida a la televisión ¿Vos que le entregaste al programa?
– Nada. Uno trabaja de lo que le gusta y el programa te entrega más a vos, como el cariño de la gente y la posibilidad de realizar otro tipo de trabajos. No comparto esa idea de Mirtha. Uno no le entrega la vida al trabajo.
– ¿Y tu añosa permanencia a qué se debe?
– Tiene que ver con una decisión personal en cuanto a la cantidad de buitres que hay en el medio, no digo compañeros de trabajo, sino de empresas que a lo mejor uno no quiere trabajar. Yo encuentro en Showmatch una comodidad muy importante porque es una empresa que me trata bien y donde hay un trato muy interesante.
– Hablando de trato ¿Qué tiene Feudale para ungirse como la única mujer que le duró a Marcelo?
– Que no vivo con él todos los días (risas). Yo lo veo a Marcelo una hora y media durante el trabajo y tres veces por semana.
– ¿Siempre lo miraste como jefe o alguna vez tuviste algún ratón? – No. No podría estar con Marcelo porque es una persona hiperkinética y yo también. Terminaríamos estrellados. A parte a él le gustan las mujeres muy altas y de piernas. O sea, no doy su target (risas)
– ¿Tinelli es el hombre perfecto? Se convirtió en el soltero más codiciado..
– No, no es el hombre perfecto. A veces tiene mal humor y el hombre perfecto no debería tener mal humor (risas). No es mi tipo de hombre. A mí me gustan los intelectuales y nada mediáticos. Para trabajar en el medio estoy yo. Siempre salí con gente que no trabajó en el medio.
– Belén Francese se definió como su "guardiana" ¿Vos también te sumás?
– No, que haga lo que quiera (risas). Las personas somos libres de elecciones. Me parece muy lindo como discurso de chiste ahí en el programa, pero no es una realidad. Nadie le puede decir a Marcelo que es lo que tiene que hacer.
– Pero de la lista "cupido" ¿Te quedás con Coki o Flavio Mendoza?
– (risas) No, es un gran juego Showmatch. No creo que haya una realidad. Si la gente quiere creérselo está bárbaro, pero los que estamos en el medio sabemos como se maneja la televisión y es todo un show.
– Tu risa es un sello ¿Te reís para no llorar? Showmatch pasó de entretenedor a reality border. Violencia, escándalos…
– No, vos te confundís. La sociedad es violenta. No es Showmatch el que violenta a la gente. Estamos viviendo una situación de violencia en todos los ámbitos que no es normal, porque si no no habrían tantos hombres que matan tantas mujeres.
– Sí, pero el certamen en vez de priorizar la paz, colabora con la guerra…
– Insisto, lo que se ve en Showmatch no es lo que Showmatch produce sino lo que refleja en una sociedad en crisis.
– Si no trabajaras en el programa ¿Lo mirarías?
– No lo sé. Trabajo en él. Es una pregunta que no te la puedo responder. Una utopía…

