Suri ganó una mansión de su papá Tom Cruise, de 12 millones de dólares. Pero, existe un pequeño detalle, su mamá, Katie Holmes, no tiene intensiones de mudarse a esa casa. Parece que ella teme que el inmueble tenga cámaras, colocadas por el actor para vigilar sus movimientos.

Una fuente cercana, afirmó que ‘Suri sólo disfrutará su lujoso regalo cuando llegue a la edad adulta y pueda decidir por ella, dónde quiere vivir’ y que la actriz prefiere mantener su vida con Suri lejos "de la mirada de Cruise", quien sigue metiéndose en su vida. ¡Qué tormento!