Es grandote y malo. Gru -así se llama- se deleita con todas las maldades. De hecho, en su oscura guarida escondida debajo de una casa negra rodeada de pasto seco -un lugar espantoso que desentona con ese barrio de jardines y rosas-, no hace otra cosa que planear su próximo golpe. Un gran golpe: robarse la Luna. Rodeado de sus diminutos secuaces y armado con su arsenal de rayos reductores, rayos congeladores y vehículos de batalla para tierra y aire, está dispuesto a eliminar todo lo que se interponga entre él y su objetivo. Pero… ¿podrá hacer lo mismo con la ilusión de tres niñitas, que logran ver en él lo que nadie ha descubierto?

De la misma factoría de La era del hielo -Illumination Entertainment, una nueva empresa de animación fundada por Chris Meledandri, ex presidente de Fox Animation- llega hoy a San Juan en estreno nacional simultáneo Mi villano favorito, una peli cargada de ternura y diversión para toda la familia.

Presionado por otro malo, -Vector, que tiene en su haber el mérito de haber hecho desaparecer las Pirámides de Egipto- Gru decide apoderarse de la Luna para consagrarse como el villano más villano del mundo. El plan incluye la ayuda de tres huérfanas, a quienes usará para su cometido. Lo que no se imagina este gigantón es que Margo, Edith y Agnes se convertirán en su mayor desafío: testarudas y simpáticas como pocas, verán en él un padre en potencia y harán latir su corazón.

La peli llega al país como un éxito de taquilla en su cuna: costó 69 millones de dólares, menos de la mitad que otras por el estilo como Toy Story 3 y Cómo entrenar a tu dragón; y sólo en Estados Unidos ya lleva recaudados más de 160 millones. Conclusión: Se viene la secuela.