Luli esta radiante y su voluminosa dentadura de comercial de dentífrico brilla más que nunca. No es para menos, la reconciliación con Martín Redrado la tiene en las nubes, tanto así que hasta cuenta cada detalle de su romance, como que habrían tenido relaciones íntimas en un avión en el que viajaron rumbo a París (¿habrán ido a buscar a la cigüeña?) para festejar el cumpleaños de ella, el 7 de noviembre.

Luli Pop está de vuelta y todo gracias al regreso del ex titular del Banco Nación a sus brazos. La confirmación fue en las revistas Gente y Caras en las que lanzaron frases de novela como: "Apostamos a que nuestro amor funcione". Ella está metidísima con su Mr. Big (sugestivo apodo que le puso en un principio para mantenerlo en el anonimato) y parece haber olvidado aquel primer intento frustrado de blanqueo, hace ocho meses; cuando decidió salir a gritar su amor y él, ofuscado por la exposición, cortó abruptamente. Pero Lu ya borró de su disco rígido las veces que lo catalogó como "perverso" y "mentiroso", entre otros adjetivos poco felices hacia el economista, que en septiembre sopló las 50 velitas.

Fueron sus palabras en Twitter y los rumores que circularon como pan caliente lo que apresuró el blanqueo. Que habían volado a la ciudad parisina por separado para escapar a los flashes y desorientar a Ivana Pagés, la ex de él; que se instalaron en el lujoso Ritz-Carlton, que Redrado gastó 13.900 euros diarios y que hasta rentaron un lujosísimo Jaguar, cuyo valor oscila los 800.000 dólares. Estas son algunas de las versiones de la luna de miel express que celebraron los tortolitos.

"Hay algo muy fuerte que nos une, que aún no podemos comprender. No podemos vivir el uno sin el otro", confesó la blonda. Aunque siempre estuvo en el candelero por sus idilios con celebridades, nunca oficializó ninguno hasta que Redrado llegó a su vida. Nada tonta para elegir partido. (Ftes: Primiciasya.com, Terra, 26Noticias).