Subió al escenario con ese estilo campechano que sus seguidores ya habían visto por tele o videos. Nada de brillos ni strasses. Ni de divismos o exigencias (tampoco para la prensa). De pantalón, remera, chaleco y zapatillas apareció ante la gente, que rugió su presencia. Y desde esa sencillez que también se reflejó en sus amenas charlas con el público, surgió la encantadora artista que llenó los oídos de música y simpatía. Anoche, al cierre de esta edición, la cantautora española Rosana se metía en el bolsillo a los sanjuaninos que habían colmado el Auditorio Juan Victoria, en la que fue su primera presentación en la provincia.

"Muchísimas, muchísimas gracias", fueron las primeras palabras que pronunció la canaria, que también puso sus toques de humor a lo largo del recital. De hecho, fue con la complicidad total del público que gastó una broma a los que llegaron tarde, haciéndoles creer que el show estaba terminando. Pero la cosa recién comenzaba y todavía quedaba mucho por cantar, por palmear y por aplaudir.

"¡Buenos días, mundo!" es el disco que la trajo a San Juan, acompañada por sus tres músicos. Temas como Sólo veo lo que siento y Un trozo de cielo fueron poblando el cálido encuentro con sus fans de este lado del Atlántico. Pero aquellos que esperaban El talismán, Si tu no estás o Contigo, entre otros hits, no se sintieron defraudados, porque en su debut local Rosana fue pura entrega. Un acierto de los productores locales.