"Hay conciertos buenos y otros muy buenos, y después están noches como la de anoche en San Juan, Cuyo", escribió ayer en su cuenta oficial Andrés Calamaro. En una larga carta, dijo, entre otras cosas "No existen palabras en el diccionario para traducir lo que se siente cuando un público reacciona con semejante gratitud y entrega. (…) Casi no hay países en donde ocurran estos incendios espontáneos de brazos en alto (…) Sólo después de celebrarlo en la intimidad de mi suite presidencial, después de reposar el momento vivido, apuro un comentario para agradecer al respetable sanjuanino la desmesura de buenísima sensación que nos dejaron a mis compañeros y a mí (…) remontamos lo inalcanzable, gracias a la entrega inédita de un público que merece considerarse el público que sueña tener Mick Jagger".