Luego de terminar su participación en Showmatch, en el Bailando, Eleonora Cassano aseguró que de todas maneras buscará ayudar a cumplir el sueño de Casa SAHNI (Sociedad Amigos del Hospital de Niños), la entidad que representó mientras estuvo en el certamen. "La idea está en poder concretar algo, ellas me dijeron para el año que viene, si puedo ir a la casa, podemos organizar alguna clase magistral como para recaudar fondos para la casa, tratar de concretar para que le sirva a la Casa SAHNI. Tengo muchas ganas de concretar el sueño" dijo la bailarina ayer, en comunicación con DIARIO DE CUYO, que consistía en equipar la sede que tiene la organización que hospeda a niños de departamentos alejados que enfrentan tratamientos ambulatorios.
El sueño sanjuanino quedó trunco el lunes, cuando Cassano tuvo que medirse en el teléfono con Anita Martínez y el Bicho Gómez, que obtuvieron el 66.36 por ciento de los votos, dejando afuera a Eleonora, que aunque admite que sabía que iba a sentencia por el puntaje obtenido en el K-pop, esperaba otra definición de parte del jurado que integran Moria Casán, Soledad Silveyra, Marcelo Polino y Nacha Guevara.
"Después del duelo realmente quedé sorprendida, porque el baile había sido excelente. Sabía que iba a la sentencia por el puntaje, pero de todas las veces que estuve sentenciada, fue la que menos esperé ir al teléfono. Pensé que me iban a salvar primera o segunda…Cuando quedé en el teléfono no lo podía creer" comentó la artista, que agregó: "Yo pensé que iban Hernán (Piquín) y el Bicho (Gómez) al teléfono, por lo que Hernán decía que quería renunciar y cuando lo salvan a él… no esperaba eso", insistió.
Cassano integraba el grupo de los "virtuosos", junto a Maximiliano Guerra, Patricia Vaca, Cecilia Figaredo, Hernán Piquín, Mora Godoy y Laura Fidalgo. Todos bailarines profesionales, que fue la gran apuesta de este año en Showmatch, integrar a grandes de la danza con los mediáticos.
"Cuando hicimos el Clásico, que fue el segundo ritmo estaba totalmente descolocada. Porque en ese momento dije, yo bailando clásico, ¿cómo no me van a poner diez? A mí no me dijeron nada, pero le pegaron a mi bailarín. Después empecé a tomar conciencia por dónde pasaba el show y enseguida me acomodé; la verdad es que me acomodé rápido, me prendí en la onda, y comencé a sentirme cómoda recién desde el tercer o cuarto ritmo" confiesa hoy la exparticipante.
Sí su presencia en el Bailando había dejado de interesar a la producción, Cassano dijo no saberlo, pero sí dejó en claro su postura sobre el programa. "Esto es justamente el show y sé claramente que no se basa en el baile, y en parte ellos manejan un poquito quién se salva y quién no. Pero yo te digo que estoy tranquila y feliz de haber llegado hasta acá, si bien me hubiera gustado estar entre los cuatro finalistas, o llegar a la semifinal… pero sabía que era una situación que llegaría, si no era el lunes, era en la otra sentencia, todos estábamos en esa situación. Me siento feliz de haber llegado hasta acá, ya fueran situaciones súper agradables, y las no tan lindas, creo que todo te potencia y de todo hay que sacar algo bueno", sostuvo Eleonora, quien además consideró que los miembros del jurado "no siempre pudieron opinar o calificar lo que hubiera querido calificar".
Cassano analizó como "positivo" su paso por el Bailando, que le permitió "estar en los hogares de mucha gente que jamás tuvo la oportunidad" de verla bailar. Realmente me divertí mucho haciendo todo lo que hice, bailé ritmos que nunca imaginé y en el transcurso lo disfruté muchísimo". Es por eso que no descartó aceptar volver a la pista de Showmatch si la convocan el año que viene, como se había barajado.

