Al igual que en la televisión en vivo, en las trasmisiones de Instagram también pueden suceder imprevistos que desencadenan insólitos bloopers. Esto fue lo que le sucedió a Cecilia Bolocco, que estaba realizando un live en esa red social, donde tiene un millón de seguidores, para hablar sobre el primer seminario de la Fundación Care, que ella preside y que se dedica a la lucha contra el cáncer. El tema que estaba tratando era por demás serio, pero todo cambió cuando uno de los internautas que se había unido a la conversación, le jugó una mala pasada.

Todo comenzó cuando, en un momento, ella se dispone a agradecer los saludos de la gente y, en voz alta, leyó: “Hola, te mando saludos. Ana Lisa Melano”. Apenas lo dijo, se dio cuenta de la broma en la que la habían hecho caer. “¡Ayyyyy tontaaaa! ¡Caí de nuevo! Estaba hablando de cosas importantes. ¿Quién fue?”, acotó entre risas. Sin embargo, decidió restarle importancia y seguir adelante con el vivo.

De todas formas, minutos más tarde, leyó otro mensaje de un internauta tratándola de “inocente”, que hacía referencia a lo que había ocurrido. “Volví a caer, ¿podés creer? Qué tonta leyendo la cuestión. Es que no era el nombre de la persona, sino que era el mensaje. Me lo puso así, taca, taca, taca y yo lo leí”, admitió.

En el mismo vivo, Bolocco también contó que está atravesando el covid, y por eso no pudo estar presente físicamente en el seminario. “Lo he pasado tan mal...no se lo imaginan, y eso que tengo cuatro vacunas. Pero ya me estoy sintiendo mejor. Ayer me sentí mejor por la mañana y me puse a trabajar como una loca, a organizar cosas. Y a la hora y media me empecé a sentir mal, mal. Tenía 39 de fiebre, la cabeza se me iba a explotar, me empecé como a ahogar. Atroz sentirme así, es bien angustiante pero doy gracias a Dios que estoy en mi casa. Esto ya va a pasar”.

Lo cierto es que esta no es la primera vez que Cecilia cae en este tipo de bromas. A mediados de 2021, la exmodelo había vivido una situación similar, también en una trasmisión de Instagram. En aquella oportunidad, había leído otro comentario con doble sentido: “Saludos desde Lomas Turbas…”. Pero en esa ocasión había sido su hijo Máximo quien la había advertido. “Yo no sé dónde queda Lomas Turbas”, había expresado, sin todavía darse cuenta. Entonces, el adolescente comenzó a gritarle desde atrás de cámara, y cuando ella se corrió, se pudo observar cómo Máximo se tomaba la cara y se reía incrédulo. “Ay, mamá. Es lo masturbas”, le dijo. “¡Ay, qué estúpida soy!”, cerró ella, avergonzada.

Pero ella no es la única que cayó en este tipo de bromas. Por caso, una de los bloopers más recordados de este estilo fue el que le sucedió años atrás a Germán Paoloski en el noticiero de Telefe, cuando le mandó saludos a ‘Micho, Tito, Negro y Cabezón’. “No sé si fue mi mayor vergüenza, pero sí es un caso para recordar. Me enojé conmigo mismo y con la situación, no con la producción”, había admitido tiempo después en una entrevista.