Cada uno tiene historia propia y particular estilo. Sin embargo, los dos grupos están atravesados por una misma pasión: el reggae, ese ritmo e imaginario que también cuenta con su legión de fans en San Juan, que ya se prepara para saborear dos noches de fiesta rasta. El próximo jueves, Resistencia Suburbana hará sonar su música en la provincia. Y cuando se estén apagando los ecos de su propuesta, comenzarán a latir las vibras de Nonpalidece, que arribará el viernes, ambos en Ranqueles.
Resistencia llegará "Con la fuerza del mar", tal es el título de su último trabajo discográfico, que el 10 de julio presentará en el Séptimo Festival Cuyo Reggae, que tendrá lugar en Mendoza. Con su poesía urbana hiperrealista, su alto contenido social y su sonido demoledor, esta formación independiente que nació en el "93 en Buenos Aires y fue ganando terreno rápidamente, desgranará temas como Elevar y Una luz, y también otros de sus cuatro producciones anteriores: Cuentas pendientes (disco debut grabado en forma casera), Resistencia + IVA, La unión verdadera (con invitados, entre ellos Pity Alvarez) y Cosas que nadie oía.
"El fuego en nosotros" será, por otro lado, el eje de la ofrenda de Nonpalidece, que vio la luz el año pasado y que el 18 de agosto estrenará en el Luna Park. Nacido en El Tigre hace unos 15 años (lapso en el cual varias veces ha compartido escenarios con Resistencia) y en medio de una gira latinoamericana, la banda -cuyo nombre proviene del slang "no palidecer", tal es su actitud hacia la música- pisará nuevamente suelo sanjuanino, donde se escucharán cortes como Recompensa, En el aire, La gran mentira y Flores para tu partida.
"Nonpalidece es una banda de reggae clásico desde lo musical, pero teniendo en claro que somos de aquí y hablamos y tocamos temas que tienen que ver con nuestra realidad", aclara siempre su líder y productor artístico Néstor Ramljak, que junto a los suyos tiene otros cuatro CD’s en el haber: Dread al Control (2000), Nuevo día (2004),
Hagan correr la voz (2006) y Nonpalidesenchufado (2008).
Las entradas para los dos shows de aires jamaiquinos cuestan $35 cada una, pero hay un abono de $60 para ver ambos recitales, que tendrán lugar a las 23 en Ranqueles (Libertador pasando Balcarce). Pueden comprarse en Data y en Implossion Rockería.