Fue el ganador del Pre-Cosquín en el 2009 y se consagró artista revelación para el festival mayor de folklore en su momento. Supo construir una carrera bien cimentada como músico independiente. Dedicado actualmente a la docencia, en la enseñanza de la guitarra y el canto, más la terminación de su próximo álbum discográfico (en su home studio particular), Gustavo Troncoso reencauzó su carrera individual después de dar por concluida su etapa como miembro del conjunto Los Solistas de San Juan. Presenta en todas las instancias nuevas composiciones o canciones inéditas para los certámenes del Pre-Cosquín, pero en el último tiempo, era dejado de lado por las listas oficiales en la mayoría de los festivales y fiestas departamentales que se llevan a cabo anualmente.
Sorpresivamente, tuvo una la oportunidad de subirse nuevamente al escenario mayor de la Fiesta Nacional del Sol 2014. La semana pasada, dio un recital que si bien duró 20 minutos, le bastó para tomar aire fresco y renovado. Ante miles de espectadores, lució lo mejor de sí y les ofreció nuevas canciones a los más fieles de la tradición. Troncoso dio cátedra y para sí mismo, se llevó un plus de motivación que lo empuja a asumir nuevos desafíos. ‘Me cayó de sorpresa participar en la FNS, si bien había solicitado estar, nunca creí que me convocaran y me gustó mucho.
No me moví de la idea y concepto que vengo pregonando hace años. No es fácil presentarse con canciones inéditas, pero jamás claudiqué de mi postura artística. En cada Pre-Cosquín, cada festival, con mis hermanos fuimos dignos representantes de San Juan’, contó el músico. Desde 1990 que debutó a los 17 años de edad, hasta en la actualidad, Troncoso pasó por un extenso camino lleno de vaivenes, de evolución pero con el mismo apego a las raíces cuyanas. En esta nueva etapa, no sólo canta tonadas y cuecas, también se lleva bien con las chacareras y otros ritmos ajenos, sin embargo, en todos los casos, le escribe siempre a San Juan. Así salieron temas como ‘Tierra de Huarpes’, la zamba ‘Romance de la luna sanjuanina’ o ‘Coplas de pueblo chico’, por mencionar algunos temas que incluirán su nuevo proyecto.
Cantar en la fiesta más importante de San Juan, fue como ‘un empujón de ánimo muy fuerte. Recibí contactos, llamados, mensajes de todo tipo con elogios e invitaciones a cantar. Incluso tengo la posibilidad de presentar mi nuevo disco en la Casa de San Juan en Buenos Aires. Remonté con una alegría enorme, que vean que todavía sigo cantando’, dijo con tranquilidad. ‘Hoy no es común que te llamen, es uno el que se debe presentar. Jamás me quejé, es parte de la vida del artista. Pero evidentemente he llamado la atención y ha sido un gran paso para lo que viene’, agregó.
Precisamente se encuentra ultimando lo que vendrá para mayo, su sexto disco de estudio que probablemente se llamará ‘Esencia de mi tierra’. El por qué tanto tiempo esperar para tome protagonismo un artista y que se convierta en casi una hazaña tener escenario, Gustavo responde que: ‘Pienso que es una cuestión de experiencia, años y aprendizaje. Eso pesa. En otras épocas, los gobiernos provinciales no fomentaban la actividad de sus artistas locales y aún así vivíamos igual. Si el Estado se acuerda de nosotros apoyando una propuesta propia, me parece positivo. Esto no existía antes. No me quejo de ser músico independiente y en especial, cuyano. Es una elección de vida que requiere autogestión, hasta el día que te mueras. Si te volvés famoso y entrás en la industria, joya. Pero el reconocimiento viene con los años y la permanencia. Un cantor no necesita ni debe exigir que un gobierno lo reconozca, sino que el pueblo lo escuche, eso ya lo decía Don Atahualpa Yupanqui’, afirmó.