Durante años se constituyeron como tribus urbanas con sus propios espacios de expresión, sus propios códigos y sus reglas, cada uno formando comunidades de intensa actividad pero dispersos en la ciudad. Con el tiempo fueron conquistando espacios y un relativo reconocimiento social. Así, las corrientes del hip hop (en todas sus formas), los autodenominados gamers; quienes practican el arte drag; los que practican danzas contemporáneas; y el parkour; tienen hoy un desarrollo tal que captaron el interés de un grupo de promotores (nucleados en el Centro Cultural Conte Grand dirigido por Aníbal Peña) para constituir una iniciativa colectiva, la cual, pasó a denominarse "Experiencia Bardo". Un proyecto multidisciplinario que articula dichos sectores y que tomó mucha fuerza durante la pandemia, aprovechando las nuevas tecnologías digitales. Como prueba piloto -que tuvo lugar el 21 de septiembre pasado- los grupos artísticos que conforman Bardo (drag, k-pop, parkour, los e-sports, breaking dance y malambo fusión) pusieron en marcha una serie de podcasts audiovisuales (o videoclips experimentales) no sólo con fines promocionales, sino también como puentes de comunicación con otros colectivos artísticos para acercar a más jóvenes. Como aquella experiencia tuvo buenos resultados, con ese antecedente, ahora impulsan un festival de cultura urbana de manera online para el próximo 12 de octubre (ver recuadro). Lo que los une, es el espíritu de la diversidad y que para hacer arte no hay fronteras que impidan ensamblar identidades y lenguajes. 


El breakdance, como una rama artística del hip hop, es entendido por Emanuel Frías como un "corte en la vida rutinaria, que lleva a cuidar y trabajar el cuerpo". Bajo esta premisa, el articulador de esta área, dentro de Experiencia Bardo, explicó a DIARIO DE CUYO la importancia de promoverlo: "Nuestro punto en esto es llegar a niños, adolescentes y adultos. Sea con videos o con fotos, queremos que la gente tome conciencia que hoy, nuestra disciplina es un deporte olímpico. Somos atletas-bailarines que trabajamos para que se extienda también en los municipios". 


Ismael Manzur, una de las caras más visibles del circuito de los e-sports (deportes electrónicos) en la provincia, organiza torneos y eventos que convoca a una gran comunidad de casi mil jugadores locales en red. Su participación en el espacio reside en la idea que el videojuego es más que un entretenimiento, también una instancia de expresión y de interacción entre el usuario y la tecnología, vinculado al lenguaje audiovisual: "Es un deporte cultural porque dentro de un juego, cada usuario se rige por una mecánica, debe respetar ciertas reglas y cumplir objetivos. Nos pusimos a disposición en Bardo para dar asesoramiento en el uso de las tecnologías online, con el propósito de generar nuevos contenidos audiovisuales, capacitar y crear equipos deportivos", dijo. Santiago Jofré, es el interlocutor del grupo de arte drag integrado por once performers (Luxurius Brunelli, Marcela Rouge, Pandora Pink, Brenda Aguilera, por citar algunas). Desde su rol de productor, afirma que es un arte performático que involucra maquillaje, puesta en escena, indumentaria, estilismo, accesorios, coreografía y expresión corporal. "Estamos viviendo una evolución cultural que contribuye a que las nuevas generaciones vivan con total libertad de identidad y de expresión, tanto en la moda como en el arte, dejando de lado los clásicos estereotipos sociales de masculino y femenino. Pero queremos que el terreno sea más amplio, donde una drag pueda estar en un teatro por ejemplo", contó Jofré.


Por su parte, María del Valle Lucero, más conocida como Mavi, trabaja en el equipo Kroove, dentro de Experiencia Bardo. El mismo está integrado por bailarines, cantantes y más de diez grupos asociados, que incursionan en el K-pop (pop coreano). Hace años que lo practican habitualmente como arte callejero en las escaleras del Centro de Convenciones, reuniendo a un número de adolescentes de entre 13 y 18 y hasta 28 años de edad. "Ser parte de Bardo, nos beneficia porque demostramos que lo nuestro es más que un hobby. No queremos estar encasillados y es bueno abrir círculos para alcanzar a otros sectores de San Juan", dijo Mavi y aclaró que vincularse con otros artistas urbanos promueve un clima de cooperación y cruce. 


En línea con esto, Santiago Guevara, del Team Zonda, remarca que el parkour es una de las disciplinas más versátiles a la hora de vincularse con todas las ramas del arte urbano. En su concepción, el parkour significa "recorrido", esa una gimnasia expresiva del cuerpo y su desplazamiento. "La ciudad es un lienzo y nuestro cuerpo es el pincel, con él hacemos trazos, acrobacias y piruetas, es un arte libre que no tiene reglas", sostuvo el artista, que a través del canal de Youtube Team Zonda, suben episodios web para promocionar y enseñar técnicas. Por último, Ana Paula Anzor, junto a Juan Pelieter, coordinan la compañía Malambo Fusión, integrada por malambistas que fusionan danza folklórica y contemporánea. Ella considera que Bardo representa una oportunidad para capacitarse y crecer: "Nuestro objetivo es desarrollar una producción que sea capaz, por qué no, de mostrarlo en el Teatro del Bicentenario. Esto puede contribuir a crear nuevas fuentes de trabajo", comentó con grandes ilusiones. "Podemos demostrar con todas estas disciplinas que realmente la unión hace la fuerza, sea escénica o callejera, podemos fusionarnos en algo grande. Porque el arte es amplio y abierto a todos", dejó Ana Paula como reflexión final.


Actividad cultural


El próximo 12 de octubre, Día de la Diversidad Cultural, Experiencia Bardo ofrecerá un festival o pasarela en modo virtual a través de las redes sociales, con una producción audiovisual desde el Centro Cultural Conte Grand. Son tres actos, con temática urbana: Ágora, Resguardo y Andar Origen. La intervención performática estará enlazada con el DJ Diego Contreras, con un paisaje sonoro basado en el organic house andino fusión.
Comenzará a las 21hs y será gratuita por @cccontegrand.