Victoria atraviesa su mejor momento profesional pero está hecha una furia, parece que estar lejos de su hermana Stefanía le hace mal y no puede con sus ataques de rabia. Operativo prensa del verano o producto de la soledad que la tiene a mal traer, lo cierto es que la nueva chica Barbierísima está en pie de guerra con Violeta Lo Re, una de las tantas ex de Ricardo Fort y rival suya en Mar del Plata.

Por celos, envidia o sed de escándalo, Vicky mantiene un caliente tet a tet con la escultural modelo de la revista Totalmente Locos, en la misma ciudad en la que la platinada hace temporada junto a Carmen Barbieri. ¡Oh, casualidad!

Después de saltar como leche hervida cuando el conductor de Animales Sueltos se rió de sus errores de ortografía, la blonda quiere estamparle un bozal legal a la morocha, encarnizada con ganarle la pulseada a la que acusó de ser "sucia" e infiel.

"Yo voy a un médico muy conocido y sé que ella se va a atender porque está caliente con él", disparó en Intrusos sobre la morena novia del músico Martín Pastor.

La moza, que saltó al pileta mediática como una de las explosivas mellizas griegas, volvió al circuito al atribuírsele un supuesto romance con Hernán Cabanas, su compañero en el teatro, el ex Soñando por bailar y del Bailando por un sueño.

Camino a convertirse en revelación del verano marplatense, Victoria niega las versiones. Sin embargo, Primiciasya.com publicó que la parejita fue sorprendida yendo al gimnasio y a comprar comida, entre otras cosas.

¿Por qué tanto misterio? Ella no está ni comprometida ni casada ni nada y él tampoco. ¿Se le subieron los humos a su enrulada cabellera?

Para aprovechar el empujón y mantenerse en carrera un tiempito más (por las dudas que la noticia se desvanezca demasiado rápido en el Olimpo mediático), esta linda Afrodita no tuvo problemas en mostrar su siliconado buen venir, haciendo un infartante topless en Mardel. Como para subir la temperatura del ratoneo argento ¿vio?

"Yo no tomo Sol con la parte de arriba por las marcas", "me fui a la playa porque en la pileta no me cambiaron el agua y no la puedo usar. Menos mal que no me saqué la parte de abajo", fueron las palabras de esta divinidad mitológica convertida en un verdadero ventarrón de plumas.