Los llamados "Dibujos italianos" de Francis Bacon, definidos por el escritor Giorgio Soavi como "extraordinarios", integran la muestra La Punta del Iceberg que inaugura este jueves a las 20.30 en el Centro Cultural José Amadeo Conte Grand (San Luis y Las Heras) y podrá visitarse hasta el próximo 24 de abril -lunes a sábado de 10 a 14 y 16 a 20 y domingos y feriados de 17 a 21-.

Esta colección de 40 dibujos del genial artista irlandés -uno de los principales artistas del siglo XX- aterriza exclusivamente en esta provincia, luego de su montaje en Buenos Aires.

La exposición, curada por Massimo Scaringella, con textos del crítico de arte Edward Lucie-Smith, entre otros; muestra un conjunto de dibujos en papel sobre personajes monstruosos, típicos de la iconografía del famoso pintor fallecido en 1992, que plasmó sus tortuosas experiencias en el lienzo y el papel.

Desde su infancia, la vida de Bacon no fue fácil. Padecía de asma crónica,

tuvo una formación escolar irregular porque la enfermedad le impedía acudir al colegio y a los 16 años fue expulsado de la casa por su padre, al manifestar sus inclinaciones homosexuales.

Cuando decidió que el tema de sus pinturas sería la vida en la muerte: buscó a su yo más vital, pero también al más autodestructivo. En 1929, regresó a Londres, y de forma autodidacta comenzó a pintar en óleo. Como no había logrado el reconocimiento, cuando cumplió 35 años, por su carácter temperamental, destruyó casi todos sus cuadros.

En 1964 conoció a George Dyer, a quien sorprendió robando en su taller e hizo su amante hasta que terminó suicidándose con barbitúricos en 1971. Tres años después, inició su relación más estable, con el joven John Edwards, quien heredaría sus bienes (valorados en 11 millones de libras). Ambos, cada uno a su manera, inspiraron sus mejores cuadros.

La exposición estará acompañada de textos, reproducciones de obras en color, proyecciones de películas sobre su vida y obra, y charlas para escuelas y público en general.