Dtoke, uno de los precursores del freestyle en la Argentina y finalista de Freestyle Master Series Argentina 2019, es Gastón Serrano, único bicampeón nacional de Red Bull Batalla de los Gallos Argentina (2013/2015), campeón internacional Red Bull Batalla de los Gallos 2013 y campeón Internacional El Quinto Escalón 2017. Nació en Buenos Aires, fue el primer rapero popular argentino de la nueva generación. Empezó a rapear a los 21 años (tiene 33), cuando las batallas todavía no eran populares, hasta que en 2009 armó junto a sus amigos el Halabalusa, un potrero de batallas de rap junto a las vías del tren en Claypole, que más tarde inspiraría la creación de El Quinto Escalón (la batalla de plaza más importante de la Argentina). Del fenómeno en que se han convertido las batallas entre raperos -conocidas como batallas de gallos- habló con Télam: 

– ¿Esperabas este boom?
– Tenía la ilusión de una utopía de este estilo, pero en ese momento si me preguntabas no apostaba a que pasaría esto, no creía que iba a explotar tanto. Tenía esa ilusión pero lo veía como algo utópico.

– ¿Qué fue lo que cambió? 
– Creo que hubo una corriente en un momento justo, en el momento preciso. Fueron muchas cosas que fueron pasando en su momento preciso. El Quinto Escalón creo que fue clave, pero asimismo si nos remontamos para atrás y adelante vamos a encontrar muchos puntos clave que hicieron a que se llegara a este punto. Pero creo que El Quinto Escalón fue clave para la cantidad de artistas que salieron de ahí, que el freestyle se vio como plataforma de despegue y al mismo tiempo parecía que el freestyle era una plataforma de despegue para una carrera musical y hoy en día nos damos cuenta que estamos llenado los mismos estadios que con la parte musical. El freestyle tiene un atractivo increíble, hay raperos y freestylers increíbles en todos lados. Antes para veías 3 o 4 rimas virales por año y hoy en día hay 4, 5 o 6 por fin de semana. Eso hace que la gente esté más conectada, que tenga más contenido y que esté curtiendo la movida todo el tiempo.

– Ustedes son la versión moderna de un trovador, que canta lo que está pasando.¿Hubo mucha cuestión combativa en las rimas?
– Yo hablo por mí, yo usaba mucho los minutos de presentación para decir lo que pensaba yo. No sé si la bajada de línea le habrá llegado a mucha gente, pero cuando estoy ahí arriba me defiendo a mí mismo y a lo que pienso. Es mi cara, mi nombre y más de una vez he puteado al ex presidente Macri, haciéndome cargo de lo que decía porque era lo que sentía. Después hay gente que es más involucrada y otra menos involucrada, yo no estaba haciendo música sino te aseguro que hubiera hecho más de una canción de protesta. Pero bueno, tenía los minutos de presentación donde había mucha gente viendo lo que estaba haciendo y he bajado data muchas veces por ahí porque era lo que sentía, lo que veía a mi alrededor y lo que me preocupaba. Después hay gente que usa ese espacio y otra que no la usa, como hay gente más tibia por ahí, pero siempre con su ideología y su forma de ver las cosas.

– En el marco de ese crecimiento, ¿empezaron a venir chicos del interior? ¿Qué te pareció?
– Yo los tengo vistos porque he viajado mucho y los eventos que producíamos con Papo y en una época que producía yo por mi cuenta siempre era ir a competir con los campeones locales, sentarnos de jurado y poder ver a los competidores locales y sabíamos que había un muy buen nivel. La accesibilidad a Buenos Aires no es fácil y por ahí tienen muy pocas oportunidades, si el día que tuviste una oportunidad no la partiste al medio pasó, se fue. Hemos visto casos de pibes que venían que parecía que se iban a comer la escena y fue un evento. Entonces bueno, sostenerlo, volverte rentable para la industria del freestyle también tiene que ver porque sino no invierten en vos. Cuando sos de lejos y las oportunidades escasean tenés quizás una chance de partirla y si no la partís, pasa de largo. Los que lo pudieron aprovechar están acá dando vueltas o por ascender.