Con un género que en San Juan lleva pantalones y corbata; hoy, Carla Coria y Mercedes Cástino suben a escena en La Faustina (ver aparte) para mostrar que las mujeres también pueden hacer reír. Apoyadas en la columna del café concert, la dupla femenina tendrá su bautismo de fuego en la provincia con I’mpro, una creación colectiva en el que harán migas con dos actores, Javier Moriset y Seba Ozdoba.

El predominio masculino en este rubro, no siempre fue así. En Buenos Aires; cuando floreció allá por los "70, los café concert del empresario Lino Patalano y La botica del Angel de Eduardo Bergara Leumann, entre otros, brillaron con las voces y las actuaciones de Nacha Guevara, Edda Díaz, Susana Rinaldi y Marikena Monti, una generación que sumó fuerzas a glorias del espectáculo como Niní Marshall, Cipe Lincovsky y Tita Merello. Aunque en la capital del país es más frecuente ver polleras en estos reductos, en las ciudades del interior esta tendencia va instalándose tímidamente.

Así es que, seguras de sus habilidades; esta pareja de chicas no tiene miedo a subirse a un barco timoneado por hombres, que, en la gran mayoría de los casos, incluyen personajes femeninos en su repertorio, toda una paradoja…

Claro que ellas saben que meterse con el humor, no desde el tradicional rol de comediante arriba de un escenario -donde la mujer se mueve como pez en el agua-, sino dentro de espacios no convencionales, representa todo un desafío. Como apunta Carla, "el reto es doble, principalmente, en las provincias y sobre todo en San Juan’.

La actriz recalca que "en esta provincia, es muy difícil para una artista hacer esto’. "Es aquí donde está el público más difícil, si acá nos dan el visto bueno vamos a gustar en todo el país. Sabemos que es una prueba complicada por que no es común ver a mujeres haciendo este tipo de apuestas’, argumenta la rubia que no se imagina en otro lugar que no sea un escenario.

Coincidiendo con su compañera; para Mercedes, la simple razón de que estos sitios destinados al arte estén tomados por hombres, "tiene que ver con una cultura más machista, así como en el humor, todos los demás rubros están ocupados por ellos".

Luego de ser parte de experiencias de teatro no convencional en Buenos Aires, "Mecha’ apunta que: "Generalmente, en teatro, es más fácil que haga reír un hombre, salvo que sea una mujer muy rara que cause gracia desde su aspecto’.

"Cuando decís humor, por lo general, decís hombre. Pero la mujer vive un auge que no debe desaprovechar para ocupar estos roles’, expresaron las jóvenes que, como dicen, llevan "la pollera bien puesta’.