Si bien Attias escudó su cambio capilar en cuanto gorrito pudo y mantuvo el hermetismo -o el "factor sorpresa", como dijo su marido el Turco Naim durante el rodaje provincial de Minou-, Tinelli (que todo lo puede) logró el lunes que lo mostrara en el Bailando -y quemar abruptamente la primicia pautada para la revista Gente-. Pero no fue una tarea fácil para el Cabezón. Después de que la actriz bailara fallidamente la lambada y recibiera un tibio puntaje del fatídico Jurado, el conductor (mediante persecutas e insistencias) no paró hasta salirse con las suyas -o sea, sacarle el postizo castaño y exhibir su cabecita-.

"Dale, mostramelo. Quiero ver tu nuevo look", dijo canchero. "No puedo, tengo pincitas que me atan la peluca. Te prometo que para el próximo ritmo lo muestro", tiró ella y en pos de reservas estéticas.

Pero Attias aflojó y decidió quitarse la falsa cabellera y mostrar la real. ¿Qué se vio? Una impronta muy parecida a Marie Fredriksson, la cantante de Roxette y a la guarra de Pink -y un post agradecimiento al gobernador Gioja, Dante Elizondo, Jorge Pez y al cariño de los sanjuaninos-.

¿Complicó en algo que muestre su look antes de que lo haga para Gente? "Para nada. Somos amigos con toda la gente de la revista. Además, no es que Emilia tenía exclusividad porque la revista la contrató y le pagó una exclusiva. Emilia lo que hizo fue no salir en otras revistas, pero no condicionaba la tele", explicó Denise del Piano a DIARIO DE CUYO, productora de Minou.