El revuelo generado a partir de la muerte de Diego Maradona pareciera haber corrido del centro de la escena lo que realmente importa: comprobar si estuvo bien cuidado y si era imposible prever el desenlace fatal. Por el contrario, ya comenzaron los fuertes cruces en torno a la herencia del Diez y, en el medio, una feroz interna familiar que mantiene enfrentadas a tres de las hermanas del astro del fútbol, Ana, Kitty y Lili, con sus hijas mayores, Dalma y Gianinna.

Ana es una de las personas del entorno de Diego más buscada por los medios, y en los últimos días ha brindado entrevistas en las que les dedicó duras palabras a sus sobrinas. “(Diego) estaba abandonado por las hijas. ¿Cuándo vinieron ellas a verlo? Nunca, jamás, eso lo puedo comprobar”, dijo Ana, entre otras fuertes declaraciones.

Ahora bien, este viernes, con el dolor por la reciente pérdida de su hermano y la tristeza por todo lo que está ocurriendo en la familia, Ana le envió una serie de mensajes de audio al programa Intrusos, en los que pidió un poco de paz en este momento tan difícil y manifestó todo su amor por Pelusa.

“Lo que quiero aclarar es que nosotros lo amábamos como hermano. Porque primero fue mi hermano, después fue marido y luego, por ende, padre. Pero nosotras, mis hermanas y yo, estamos muy dolidas por ese mismo motivo”, manifestó con mucho dolor Ana.

En ese sentido, hizo un pedido especial: “Que nos dejen tranquilas tener nuestro duelo porque como él nos quería a nosotros, nosotros lo adorábamos. Era nuestro nene, era nuestro tesoro que nos dejó mi mamá a cargo”.

El jueves pasado, en diálogo con Los Ángeles a la Mañana, Ana, quien en años anteriores ya había dejado en claro que no tenía una buena relación con Claudia Villafañe ni sus hijas, había dicho: “Nosotros no estamos en contra de ellas, ellas están en contra de nosotras. No sé por qué, que hablen ellas y lo digan… Ellas no serían nada si no fuera por su padre. Si eran hijas de Juan Pérez, ¿quién las iba a tener donde están?”

A pesar de que durante casi toda su vida mantuvo un perfil sumamente bajo, Ana aprovechó la ocasión para dirigirse a Yanina Latorre, panelista del ciclo de El Trece, quien había señalado que las hermanas de Diego han vivido con su dinero y que, incluso, “habrían cobrado 100 mil pesos por cuidarlo un fin de semana”. Con determinación, la hermana del Diez señaló: “Quiero aclarar que esta señora que está hablando no sabe nada. Ella está mandada por las hijas de mi hermano. Que se calle, que me deje hablar, irrespetuosa como sigue siendo. ¿Que yo cobraba por estar con mi hermano? ¿De dónde sacó eso? Que lo compruebe”.

Yo jamás recibí dinero; si no, tendríamos que tener aunque sea un aire (acondicionado), no deber expensas, como tenemos deudas. Mis hijos y los hijos de mis hermanas no viven de Diego. Él era generoso, nos regalaba algo, nosotros no vivimos de él nunca, jamás”, explicó Ana. “Que se quede callada y que no nos entierre a nosotros. Encima del dolor que tenemos, porque nosotros sí que tenemos dolor, no ellos por el testamento. El dinero nunca nos interesó”, agregó.