Innovador, extrovertido y polémico; ya había expectativa antes de su llegada a la Argentina. Tanto que varios popes de la tele querían llevarlo a sus programas. Así es que Falete pasó por Susana Giménez, el domingo último, y luego se sentó a la mesa de Mirtha Legrand. Famoso en su tierra, España (tanto por su talento como por escandaletes amorosos que tomaron estado público); dueño de una voz fenomenal para las coplas y un aspecto físico que desorienta, Rafael Ojeda Rojas -su nombre real- es un artista travestido de cantaora y autodenominado "el rey y la reina del cante flamenco"; rótulo que esta noche buscará validar en el porteño teatro Gran Rex, donde presentará "¿Quién te crees tú?, su debut en el país.

"Voy a conquistar Argentina como Colón", decía a medios nacionales este curioso personaje, en cuya discografía intercala el flamenco con versiones de temas de Manuel Alejandro, Rocío Jurado, Chavela Vargas e Isabel Pantoja, entre otros; y que también le dio de comer a la prensa rosa. Fue el año pasado, tras una ruidosa separación de su pareja, un joven sevillano con el que iba a "casarse", que luego confesó no haber estado enamorado del cantante, al que le reclama 60 mil euros que le habría prestado, demanda judicial mediante y con embargo de bienes incluida.

"Yo no comulgo con los temas ajenos a la profesión y por eso me cayó como un jarro de agua fría que se me haya respondido así a mi amor sincero", contó el hijo del también famoso Falín (de Cantores de Hispalís, que revolucionaron las sevillanas). "Pero yo me refugio en la música y ahora tengo la mente puesta en la Argentina", agregó en el mismo tono dramático que imprime a sus actuaciones.