Graciela Moreira, su hijo Emilio y su nuera, la comediante sanjuanina Valeria Farfán Ale, ganaron el reality de Fox Life "Escuela para suegras", un show conducido por Santiago del Moro, Alessandra Rampolla y Jay Mammón que estuvo orientado a "reencauzar" los vínculos conflictivos entre nueras, yernos y suegras. Se emitieron 13 capítulos, en el que seis grupos familiares debieron afrontar numerosos retos y aprender cómo superar las diferencias. Hubo varios arquetipos entre las suegras participantes: "la entrometida", "la manipuladora", la "envidiosa", "la problemática", la "aliada" y "la agresiva". Graciela, de 66 años, era la "sobreprotectora" con Emilio.
La ganadora dialogó con DIARIO DE CUYO y contó su satisfacción por la experiencia vivida: "No teníamos letra, ni guión. Esto me ayudó a darme cuenta de las cosas que hacíamos mal con las nueras y los yernos. En mi caso, no sabía cuánto daño le estaba haciendo a Valeria con mi conducta. Nos fuimos conociéndonos más, hablando cosas del pasado, del presente, de los hijos, la soledad, de novios y novias anteriores, de sexo, de todo y me uní más con Valeria, le pedí perdón por todas las cosas que le hice pasar", reconoció.
Las grabaciones se realizaron en Bogotá, Colombia, donde Graciela y el resto de los participantes convivieron durante un mes. "Fue maravilloso, como unas mini-vacaciones, la gente fue muy respetuosa y cariñosa, hice muchas amistades con los técnicos y camarógrafos. Nos disfrazamos, cantamos, lloramos, reímos… y ganamos como familia".
Graciela detalló cómo resolvió las diferentes pruebas que debió sortear: "Cuido tanto a Emilio y también a ella que siempre estoy pendiente de todo lo que tienen. Les hago de comer, les lavo la ropa y los considero como mis hijos, pero siempre imponía lo que me gusta a mí, entonces, comprendí que el drama que tenía con Valeria es que a Emilio no le gusta planchar, cocinar o lavar la ropa, hacer los mandados. También la gastaba con lo que ella se vestía, porque se parecía a una Barbie de plástico y esas bobadas, las tomaba yo como una cargada, pero ignoraba que a ella eso le afectaba y la lastimaba", contó la protagonista.
Para Valeria, por su parte, significó un giro total de su vínculo con Graciela: "El cambio fue grande, después de hacer el programa, en especial en Graciela, a que deje de ser tan manipuladora o que me juzgara por la apariencia. Cuando cambió ella, me ayudó a cambiar a mí, que siempre estaba a la defensiva. Nos descubrimos como dos personas que comparten los mismos afectos y que nos queremos. El proceso fue muy lindo y nos unimos más los tres".
Además, Farfán y Emilio se dedican al stand up y consideran que su paso por el reality los potenciará en sus carreras artísticas: "La experiencia de trabajar para Fox fue muy buena, nos salió todo redondo. Sería genial volver a la televisión con un reality o participar en algún panel o conducción. Todo esto nos ayuda, el camino no es fácil, pero sigo estudiando y trabajando en actuación y canto", comentó la actriz sanjuanina.
Graciela quedó entusiasmada con la tele también. "Me vi muy cómica, histriónica, simpática, gorda y vieja, pero auténtica, no puedo fingir. Así que me gustaría ahora hacer cortos publicitarios para gente de mi edad. Es la primera vez que hacen un reality así y lo recomiendo, la van a pasar genial. La clave es sacarse de encima el ego", reflexionó.
Sobre el reality
"Escuela para suegras" es el reality show conducido por Santiago del Moro, Alessandra Rampolla y Jay Mammón.
Se filmó en Colombia para ser emitido por Latinoamérica por Fox Life. En 13 capítulos participaron seis grupos familiares (suegras, nueras y yernos). El premio por haber participado es un viaje para los tres a cualquier destino del mundo que ellos decidan con estadías y tours incluidos.
