"¿Le gustóoo o no le gustóoo?", diría José María Listorti. Y las respuestas son variopintas. A muchos seguidores (sí, varios señores también se engancharon) el final de Las mil y una noches les pareció de novela (cuac). Y otros se quedaron con sabor a agua tras el último capítulo del culebrón turco, que hizo furor en la TV argentina desde su estreno en enero de este año. Lo que no se puede discutir, es que mantuvo a miles atornillados frente al televisor; porque con 25.8 puntos de rating según Ibope, se convirtió no sólo en lo más visto del miércoles (dejó muy atrás a su rival de Telefe, Escape Perfecto, con 11.2), sino que hizo la maca más alta desde su primer capítulo.
La historia cerró (como era de esperar) con el reencuentro de Onur y Sherezade, que estaba a punto de dar el "sí quiero" a Engin. Pero en eso apareció el "si alguien se opone, que hable ahora o calle para siempre": el pequeño Kaan (que había ido a buscar a Onur para impedir que su madre tomarla una decisión de la que se arrepentiría toda su vida) junto al amor platónico de miles de argentinas, Onur; y su hija Nilufer. "Anda. Kaan tiene razón, tu perteneces allí", suspiró el resignado prometido antes de ir a llorar al campito; y la dejó ir a los brazos del amado (los violines corren por cuenta de la imaginación del lector). Eso sí, además del desenlace previsible, varios personajes secundarios se quedaron en la nada, cosa que tampoco gustó a los más disconformes; entre ellas tres sanjuaninas bien conocidas en el ambiente artístico, que (como cientos en todo el país) dijeron lo suyo.
"Se los advertí. Horrible final", sintetizó la cantante y coach Ana Belén Toledo, cabeza del instituto Tiempo de canto. "Más allá de que todos deseábamos la predictibilidad del final, tendría que haber sido con mejor desarrollo. Además, el mensaje que dejan los suegros era de destacar", acotó. "Che y el final de la novela???? (sic)", se sumó la actriz Mercedes Rivero, para luego explayarse: "En cámara lenta el final… y doña Feride no apareció más… Igual, Onur en bol… haciendo un baile turco… el sombrerito de Sherazade en pleno casorio y primer plano del cierre del vestido de brocato y la mano de Onur… La escena". Más piadosa fue la profe de arte y titular del taller Piedra, Papel y Tijera, Mariana Valverde: "Me pareció muy bueno… aunque me hubiera gustado que contaran los finales de los otros personajes también. Quedaron historias como colgadas (mamá de Onur, Mirivan, Zezen). Lo demás, muy lindo todo".

