Ayer se llevó a cabo el evento más importante de la industria del cine, la entrega de los premios Oscar, que tuvo como siempre una glamorosa alfombra roja donde las celebridades de Hollywood lucieron los mejores diseños. Más tarde dio inicio la ceremonia de la 85º edición en el escenario del Teatro Dolby, con la conducción del comediante Seth MacFarlane creador de la serie "Family Guy" y el filme "Ted", hizo un monólogo introductorio en el que bromeó sobre los candidatos a las estatuillas y sobre su propia fama de ácido bromista. Fue el rubro a mejor actor de reparto el que rompió el hielo y Christoph Waltz se llevó su segundo Oscar, dándole a Quentin Tarantino el primero de las cinco nominaciones de Django sin cadenas.
Valiente fue elegida como la Mejor película animada. Ana Karenina ganó en Vestuario, mientras que Los Miserables se llevó el primer premio en Mejor maquillaje y peinado, ganándole al Hobbit.
Se destacó que los Vengadores fue la película más popular del año y justamente fueron sus protagonistas, quienes presentaron el premio a mejor Fotografía, dándole la estatuilla dorada al chileno Claudio Miranda, por Aventura extraordinaria que segundos después también fue premiada por sus efectos visuales. Amor ganó como mejor película extranjera, dejando fuera a la chilena No.
A diferencia de ediciones anteriores, la música fue protagonista en esta ceremonia en la que también hubo un homenaje sonoro a la saga James Bond. Adele, Así, la británica Adele cantó en directo por primera vez el tema "Skyfall", canción perteneciente al filme número 23 de la saga del 007 y por la que estaba nominada. Barbra Streisand y Norah Jones también prestaron su voz a la gala mientras que Russell Crowe, Jennifer Hudson, Catherine Zeta-Jones, Anne Hathaway y Hugh Jackman habían sido convocados para rendir tributo a los recientes musicales del séptimo arte.
Al cierre de esta edición aún restaba conocer quiénes los ganadores de los rubros más preciados de esta ceremonia como mejor actriz, mejor actor, director donde Steven Spielberg era uno de los números puestos por Lincoln, que tenía 12 nominaciones y por supuesto restaba conocer cuál sería elegida mejor película, el último premio de la noche.