En un nuevo desafío para su destacada trayectoria, Alberto Sánchez Maratta retornará a las exposiciones individuales con la serie La línea del cielo, tras su última vez hace 7 años. La exhibición se inaugurará hoy miércoles a las 20 hs en la sede local de Alianza Francesa y estará compuesta de 20 dibujos realizados con tintas y óleos sobre papel. La propuesta surgió de Roberto Amigo, quien se desempeña en la investigación y la docencia en Buenos Aires y será el curador de la exposición.
"Una tarde estaba de visita en mi taller y me preguntó qué pensaba hacer con todo lo que estaba haciendo. Yo le dije que no lo tenía claro y me dijo que había que hacer una muestra y se ofreció para la curaduría de lo que se planteó en dos muestras junto a Daniel Izasa, director de la Alianza’, expresó a DIARIO DE CUYO el también Magíster en Artes.
Después de exhibir sus producciones en la muestra que tituló En blanco, en el Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson, en 2015; el también integrante del equipo de investigación en el mencionado complejo decidió montar en esta primera etapa una colección de paisajes y figuras humanas con modelo vivo a la que se abocó en su taller Casa Dibujada, durante la época de aislamiento debido a la pandemia de Covid-19. Y en diciembre próximo, Sánchez colgará una recopilación de árboles que reflejan sus meditaciones acerca de la naturaleza y tomaron forma en el mismo período que las anteriores piezas.
"En estas creaciones puede verse el aislamiento y las figuras están en un ambiente bastante solitario, tampoco existe la línea del horizonte. Pero todos son suficientemente abiertos para que las personas reflexionen, esas operaciones con la mente de los espectadores es lo que a mí me interesa’, sostuvo el hacedor respecto al objetivo central de esta propuesta.
Docente universitario, padre de Nicolás (de 11) y Minerva (de 3) junto a Natalia Segurado, el artista -que manifestó estar "feliz’ de volver a los espacios públicos- mencionó que para él el dibujo "es un instante de reflexión, no tanto de emotividad’. Cuando apenas tenía unos 4 años, sus primeros trazos fueron con el cuerpo humano. "Mi padre era dibujante publicitario y me prestaba sus libros para aprender a dibujar mediante esquemas y así comencé’, evocó.
"Mientras cursaba el secundario tenía la idea de estudiar para convertirse en cirujano plástico, pero por razones económicas no se pudo así es que opté por seguir la veta artística, que me interesaba muchísimo. Tuve la suerte inmensa que mis viejos me apoyaron siempre en todas mis decisiones, no tanto en mi profesión sino en mi vida, son muy importantes para mí’, destacó Alberto que cursó sus estudios en el Departamento de Artes Visuales de la UNSJ y, más tarde, hizo su posgrado en la Universidad de Santiago de Chile.
"Siento que el dibujo es donde me muevo más cómodamente. La pintura y el grabado también me gustan pero el dibujo es mi primer amor’, apuntó el creador que a inicios de este año presentó el libro Las amigas. Ángel Della Valle, que se publicó dentro del apartado Detalles de la colección de arte Amalia Lacroze de Fortabat y lo convirtió en el primer sanjuanino en ser parte de este emprendimiento con un volumen de 95 páginas que demandó un año y medio de trabajo en torno a una obra sobre la que existe escaso material escrito.
Dato
Las producciones podrán visitarse desde hoy en la Alianza Francesa (Mitre 202 oeste), de lunes a viernes, de 9 a 21 hs. con entrada libre y gratuita.

