"Quiero que Andrés Calamaro toque en San Juan" reza una cuenta de Facebook. Y ese deseo no es exclusivo de ese usuario y sus seguidores, sino que también alcanza al secretario de Estado de Turismo, Dante Elizondo (y seguramente del gobernador Gioja), quien manifestó su anhelo de que El Salmón sea una de las figuras de la próxima edición de la Fiesta Nacional del Sol.
"Por ahora es sólo una expresión de deseo", destacó a DIARIO DE CUYO el funcionario, a quien además le entusiasma la idea porque hace varios años que el rocker -que está presentando su flamante placa On the rock- no viene a la provincia: precisamente 12. Tal como señalan los archivos, la única vez que lo hizo fue en 1998 cuando se presentó en el Estadio Cerrado, ante unas 5 mil personas (ver abajo).
Otro que en tren de planificación podría aterrizar en la máxima celebración sanjuanina en febrero próximo es Adrián Otero, el ex Memphis La Blusera, con quien Elizondo se cruzó en la Feria Internacional de Turismo en Buenos Aires y que -charla va, charla viene- se mostró interesado en la propuesta, hasta ahora únicamente verbal. En su caso, pasó menos tiempo desde su última tocada en la San Juan, ya que fue la figura que animó la inauguración del casino en el Hotel del Bono, en 2007.
"Hay que esperar la concesión del predio, que se adjudique al concesionario. Recién entonces podremos sentarnos con el responsable a delinear los espectáculos, porque sí coordinamos juntos el tema de los artistas", agregó el secretario de Estado.
La próxima Fiesta Nacional del Sol tendrá lugar entre el martes 22 y el viernes 25 de febrero de 2011 en el Predio Ferial -adonde recalarán los artistas nacionales finalmente convenidos-. Y el sábado 26 el festejo se trasladará al Autódromo de Zonda, para vivir su jornada central, con un espectáculo vanguardista -ya en la cocina- que tendrá como eje el bicentenario del nacimiento de Domingo Faustino Sarmiento. ¿Si vienen Mirtha y Susana? "Y, eso lo tiene que ver el gobernador", expresó Elizondo.
Buenos recuerdos
"No se va, Andrés no se va" coreaba la multitud frenética que había colmado el Estadio Cerrado y que había disfrutado ya de unas dos hora de recital. Fue el 21 de marzo de 1998, cuando por primera vez Andrés Calamaro pisó suelo sanjuanino en la crema de su etapa post Rodríguez, para presentar Alta Suciedad -el segundo disco más vendido del rock argentino, después de El amor después del amor de Fito Páez- y que mechó con otros hits.
Qué voy a hacer y Flaca fueron el comienzo. Loco, Me arde y Alta suciedad, marcaron el final, pasadas las 2 de la madrugada, cuando -frutilla de la torta- el ex Abuelos (vestido con una remera negra con la cara de Alberto Olmedo) parafraseó a Fito con Te vi. En el medio quedaron gargantas peladas coreando desde las ovacionadas Cartas sin marcar hasta No se puede vivir sin amor, pasando por La Balsa, otra perlita super aplaudida, como también lo fue la compañía de Ciro Fogliatta, que deslumbró en los teclados.
Calamaro llegó cerca de las 15 y saludó al puñado de admiradoras que lo esperaba en el Aeropuerto y también a un "admirador sorpresa". Entonces senador, José Luis Gioja estaba por viajar a Buenos Aires y no resistió la tentación: entró al Vip y saludó al músico, (a quien también iría a ver al Estadio). "Sacame una foto que mis hijos no me van a creer que estuve con Calamaro", le dijo chocho al fotógrafo de DIARIO DE CUYO.
Este recital en San Juan sería uno de los últimos de Calamaro en el país, ya que desde 1999 y durante seis años no hizo shows solistas en vivo. Volvió en febrero de 2005, ante 20 mil almas, en el festival Siempre Rock que se llevó a cabo en Cosquín.

