En cada frase, un chiste. Así conversa esta mujer de voz grave, que se levanta de buen humor y dice que pocas cosas la hacen perder la paciencia. Aún peleando con su marido es capaz de terminar riéndose. Conocida por sus tangos, desde hace cinco años incursiona en el humor al estilo café concert. Patricia Vizcaíno, una mujer que decidió "decir las cosas por su nombre" sobre el escenario. Empezó hace cinco años incorporando "algunos chistecistos suaves", un poco empujada por su primo, también conocido humorista, Miguel Delgado que le sugirió mostrarse como era sobre las tablas. La cantante, que sin problemas cuenta que tiene 51 años y dos nietas, armó así su nuevo show intercalando los tangos (que canta hace 15 años) con relatos sobre temas de la vida diaria contados con puntos y comas. "Así soy yo, soy mi mejor personaje" dice, sincera, Patricia quien asegura que "la interacción con el público" le fascina y aunque sigue haciendo su show exclusivamente musical en las fiestas departamentales, el humor es lo que la define. "Me destape con estas cosas que te pasan en casa, la menopausia, por ejemplo. Contaba del lado humorístico las cosas que le veía que le pasaban a mi abuela a mi vieja y que ahora me pasaban a mí", describe mientras se abanica. "Cuando hacía el espectáculo sólo de tango, me tenía que estar sujetando, porque tenía que dar el aspecto que una señora de 50 años debe dar arriba del escenario", dice Vizcaíno.
Pero no todo es risa, porque aunque en general cuando la contratan, le piden que no cambie nada de su show, alguna que otra vez le dicen que evite las malas palabras o algún tipo de chistes. "Eso es duro, porque si me llaman saben cómo es el show, pero bueno, se hace". Vizcaíno admite que ser mujer y hacer humor en San Juan no es cosa fácil. "Me ha costado mucho, porque que no se supone que una mujer diga una mala palabra en el escenario", dice. "Cualquiera que va a ver un show de los grandes humoristas argentinos, Cacho Buenaventura, Jorge Corona, el Negro Alvarez, es más pagás para ir a verlos. Si lo hace una mujer y lo hace acá cuesta mucho al menos en los espectáculos públicos, en los eventos privados es distinto". Que gran parte de la sociedad es machista, ella no lo duda, y recuerda que en uno de sus shows un hombre de unos 60 años se levantó y le dijo a su marido "cómo la dejas que diga esas cosas en un escenario", mientras unas 300 personas reían a más no poder. Asegura que nunca le pasó que una presentación fracase." Si veo que un tipo de chistes no les gusta, cambio. Nunca me pasó que a toda la gente no le guste lo que hago". Patricia siente admiración por cómicas nacionales como Carmen Barbieri o Anita Martínez, se siente agradecida por el rumbo que tomó su carrera, aunque estar en la Fiesta Nacional del Sol "es una cuenta pendiente".