En abril próximo -del 20 al 28- se llevará a cabo en Chile la Primera Bienal de Danza Moderna y Contemporánea de Valparaíso, que entre otros objetivos tiende a generar intercambios con Cuyo. En esa línea, que denominaron "Puente del Aconcagua", es que la organización de este encuentro -principal hito del proyecto Territorios en Movimiento, a cargo de escenalborde- convocó a tres bailarinas, coreógrafas, gestoras y programadoras de la región: Sol Gorosterrazú, de Mendoza; Jimena García Blaya, de San Luis; y Giselle Slavutzky (foto), de San Juan, para quien será su primera experiencia internacional en este sentido. De uno y otro lado de la cordillera de los Andes, los creadores propiciarán que compañías de danza de Valparaíso visiten la región argentina y viceversa. 


"Nuestra labor será recorrer todos espacios donde se presentarán las obras y generar algún tipo de devolución y movilidad con las compañías, los coreógrafos y productores de Valparaíso y de Cuyo", comentó a DIARIO DE CUYO Slavutzky, directora de Crudo Danza y Festival G, integrante de Plataforma Danza San Juan; quien había tenido una vivencia similar en el programa MICA (Mercado de Industrias Culturales Argentinas). "Yo lo que conozco de la danza en ese territorio es lo que viene haciendo escenalborde, uno de los grupos impulsores de esta Bienal que tiene como antecedente más de 20 ediciones del Festival que ellos han hecho, con el foco puesto en la danza contemporánea, pero especialmente la que tiene más búsqueda y trabajo experimental", agregó. 


Slavutzky, quien manifestó sentirse "muy feliz" y "entusiasmada" de ser parte de este proyecto, explicó que también desde aquí vienen generando nexos con Chile, que continuarán este año con la nueva edición del Festival Crudo, que contempla una residencia de creación que se realizará en septiembre en Las Flores, Laboratorio de frontera.


"Creo que la Bienal nos abre un panorama y puede ser un gran puntapié para internacionalizar proyectos de la provincia y de la región en general", sumó la también politóloga local, para quien hay mucho en común en materia de danza moderna y contemporánea con el vecino país.


"Hay caminos similares, hay una historia que nos une y de hecho parece que nuestras búsquedas están más cerca de lo que sucede en Chile que de lo que pasa en Buenos Aires, que por ahí mira más hacia Europa. Hay allá una forma de hacer y pensar la danza que tiene mucho que ver con lo que se hace en San Juan, y en todo Cuyo; y esta nos parece también una buena oportunidad para poner a prueba estas hipótesis", concluyó.