San Juan, 6 de julio.- Un problema con un vuelo de Aerolíneas Argentinas en Mendoza desató la furia de Federico, el mediático hijo de Carmen Barbieri y Santiago Bal, y hasta se acordó de su paso por la provincia el sábado pasado.

"Como se me hacía tarde, agarré un auto y me fui manejando hasta la escuelita. En el apuro, llegué tarde, los pibes se enojaron y quedé como un pelotudo", explicó a Muy sobre su visita al Colegio Crucero ARA General Belgrano de San Martín.

Aunque en su cuenta personal de Twitter Federico sólo tuvo palabras de agradecimiento para los chicos aprovechó la entrevista para descargar su furia tras lo sucedido en Mendoza. Después de esperar seis horas para que le solucionen el problema, decidió volverse en colectivo: "No les pedía viajar en la cabina con el piloto. Les pedía mi asiento, o en su defecto, ir con la tripulación porque realmente necesitaba estar en mi casa por trabajo. Finalmente, tuve que gastar en un pasaje de micro para hacer durante la madrugada los casi mil kilómetros. ¡Ojalá nunca tenga que usar Aerolíneas, fue un viaje despreciable!".