Gracias a la pasión coleccionista del visionario Agustín Gnecco, quien llegó a la provincia en 1886 con la ambiciosa idea de constituir un espacio donde resguardar la historia social y cultural a través de la conservación de piezas y objetos, nació lo que es hoy el Museo Histórico Provincial que lleva su nombre. La institución que atesora un registro de más de 200 mil piezas históricas, cumple hoy 130 años de actividad.
Desde libros, documentos, fotografías, diarios, revistas, objetos de diverso tipo, filatelia (sellos, sobres y otros documentos postales) y numismática (monedas antiguas). En sus galerías y salas (con exposiciones permanentes y transitorias) se construye un recorrido por la historia de San Juan, exhibiendo reliquias de épocas coloniales hasta la primera mitad del siglo XX. En el recorrido por sus salas, DIARIO DE CUYO hizo un repaso visual de la colección y destacó los cinco objetos más representativos de sus exposiciones: la primera moneda patria que data de 1813, acuñada en plata; una máquina de coser a pedal fabricada en madera y hierro de 1864; las muñecas que forman parte de una variada colección de juguetes antiguos; la enorme puerta de madera algarrobo de siglo XVIII que, dividida en tres partes, aún conserva sus manijas; y un fonógrafo marca Edison de 1896. Sin embargo, resulta difícil determinar cuál de las piezas sea las más importante, ya que todas tienen un alto valor patrimonial y simbólico. Además, no hay que dejar de lado, la clásica sala sobre la moda, donde hay vestidos y utensilios para la mujer y el varón. También hay objetos de madera, hierro y cuero fabricados artesanalmente a mano. Retratos fotográficos de 1869 de los pioneros de esta actividad en la provincia.
El libro de José Ignacio de la Roza, el primer gobernador de San Juan, junto a documentos y cartas firmados por Francisco N. Laprida, San Martín y Fray Justo Santa María de Oro. La lista es interminable, solo basta acercarse por el museo para descubrir y conocer la historia provincial.