Que sepa abrir la puerta para ir a jugar…Y de repente los juguetes de la abuela salieron del baúl de los recuerdos para tomar las salas del Museo Histórico Provincial Agustín Gnecco (Av. Rawson y Gral Paz), desde hoy a las 19, con la inauguración de la exposición Aquellos queridos juguetes, animada por el color de los títeres locales.
En un mundo muy lejos de los coches manejados a control remoto, las barbies y las consolas de videojuegos; aquí, los juguetes vienen de manos de nonos, tías y papás que alguna vez fueron niños y los guardaron como un tesoro. No importa que las muñecas tengan su pelito gastado por esas manitas traviesas que tanto lo peinaron y lavaron; sus cuerpitos de trapo están intactos, al igual que sus vestiditos, algunos hechos a mano. O bien, que los cochecitos de lata tengan sus rueditas gastadas; o que el triciclo ya no consiga la velocidad de los viejos tiempos.
Cada uno con la foto de sus dueños; todo, guarda la magia de transportar al visitante al fantástico mundo del juego, donde las camitas y los roperos para las muñecas era fabricado y pintado por papi. Hasta hay una coneja de trapo confeccionada a mano en 1922, un monito de paño lenci, muñecas de porcelana y un osito rojo de baquelita.
Divertido para los bajitos y quizás nostálgico para los más grandes; este paseo pudo concretarse, después de la convocatoria a la comunidad que arrancó en octubre de 2012 con la idea de exhibir los juguetes de los sanjuaninos en el pasado Congreso de la Niñez y la Adolescencia. Así, esta tarde, el país de las maravillas se abre al público gatis, ideal para recorrer en familia en estas vacas de invierno.

