Peligrosamente infartante, sus curvas acusan 93-60-91 y parten la tierra, pero esas no son las únicas armas de esta señorita. Mendocina de pura cepa, Sabrina Rojas tiene todo lo necesario para defender a su hombre con uñas y dientes. "Estamos más enamorados que nunca" disparó, saliendo al cruce de las versiones que indican que Luciano Castro la habría cambiado por otra.
Desde hace rato, los portales del espectáculo apuntan a un romance entre el galán y Romina Gaetani, su compañera en Herederos de una venganza, tira que la rompe en Canal 13. Incluso, Primiciasya.com publicó que "Sabri" se fue con sus trapos a otra parte como un alma en pena.
Leona en celo, la voluptuosísima sacó las garras y desmintió todo. "No tengo motivos para dudar de mi novio", expresó la despampanante diosa que empezó su historia con el fibroso muchacho, cuando el éxito televisivo de Valientes llegó al teatro y la Rojas se integró al reparto.
Él muy lejos de la conductora Elizabeth Vernaci y ella de un noviazgo de años -tras su pasado con el animador Hernán Caire-. Ambos cayeron flechados por cupido y no tardaron en armar su nidito el año pasado.
Pero la novela del Trece arrancó sus grabaciones y el amor se le vino abajo como castillo de naipes a la cuyana. Todo explotó con las fotos de Caras retratando a los protagonistas muy juguetones (juego de manos, juego de villanos, dicen…). Es más, la Gaetani ya habría blanqueado la ruptura con el empresario Hernán Nisenbaum.
Pese al bochorno, Sabrinita aseguró en Gente: "Sé muy bien cómo es el hombre con quien duermo". "Hacemos vida familiar y ningún chimento ni fotógrafo escondido van a condicionarla", subrayó la chica que, casualidad o no, programó una escapada a Miami, a la que irá solita su alma.
Conejita en Playboy, jugó a la enfermera hot para la revista Hombre, exhibió su escultural belleza como Dios la trajo al mundo en otras tantas publicaciones masculinas -para la fiesta del ratoneo criollo…- y se calzó las plumas para Nito Artaza y Miguel Angel Cherutti, sin contar su aparición en Bailando por un sueño 2010.
Sin embargo, la relación con Luciano la borró del mapa y la convirtió en una señora de su casa, hasta hoy. ¿Tendrá que volver a poner el cuerpito en el asador? Los señores a saltar en una pata…(Ftes: TN, Primiciasya.com)