El próximo sábado, a las 21.30 en Plaza Centenario de Villa Krause y con entrada gratis, se ofrecerá el espectáculo Misa Criolla y Cantar de los Oficios. Será, nuevamente, con la actuación de Jaime Torres y un coro municipal con voces renovadas y la nueva batuta de Carlos Stancoff.
El charanguista tucumano de 77 años volverá a ser la figura central de esta obra compuesta por el fallecido Ariel Ramírez, en la que también actuará el Ballet Rawson y Sur, el grupo musical Huarpes y los solistas Giselle Aldeco y Kuki Vega.
Ayer, en conferencia de prensa junto a autoridades municipales, los artistas anticiparon parte de la puesta que tendrá en escena a 150 personas y se desarrollará en el marco de Semana Santa.
Bajo la dirección de Cosme Yañez, como es habitual, se interpretará El cantar de los oficios, de Daniel Altamirano, revalorizando los oficios y el trabajo con la familia como ejes fundamentales de la sociedad; y la obra inspirada en la vida y pasión de Jesús, de autoría de Ramírez.
Como nuevo
Tras dirigir el coro de niños Santa Cecilia de 2002 a 2008 y luego llevar la batuta de la agrupación municipal de Pocito, el 4 de marzo pasado, Carlos Stancoff se sumó al conjunto de Rawson para debutar con la Misa Criolla en menos de un mes.
‘Cuando me convocaron Carolina Bustos, directora de Centros y Programas Culturales; y Lucía Muñoz, directora de Cultura del municipio, acepté inmediatamente. A la tarde, me dijeron de la Misa Criolla y como la mayoría de los cantantes tomaron otro rumbo, armamos una convocatoria para traer nuevas voces’, destacó la flamante batuta.
Así, Stancoff armó un nuevo coro en 21 días, integrado por 35 persones de entre 15 y 60 años. ‘Algunos vocalistas vienen de otros conjuntos y otros no, pero estoy acostumbrado. Este es uno de los desafíos más grandes porque nuestra presentación será nada más y nada menos que con la Misa Criolla y un maestro como Jaime Torres, todo un honor’, apuntó quien coordinó esta pieza, por primera vez, con el dúo Díaz Heredia en Imagen y Semejanza en 2010.
El mayor obstáculo que tuvo que superar fue que, técnicamente, la Misa Criolla ‘no se puede cantar de oído, hay que leer la pieza’.
‘En general, cuando armo un recital hago que el coreuta se exprese también con el cuerpo pero la Misa Criolla es más solemne por eso la expresión se la dejaremos a los bailarines. Vamos a respetar el marco de intimidad y hacer que nuestro canto llegue a los corazones de los fieles’, manifestó quien tiene como planes futuros recorrer distintas parroquias con los versos de la Misa y a fin de año interpretar La navidad nuestra.