La muerte de Taylor Hawkins, el baterista de Foo Fighters, sacudió al mundo de la música la noche del viernes. La banda norteamericana estaba a punto de presentarse en Bogotá, Colombia.

La parada previa había sido el 21 de marzo en el Lollapalooza, en Argentina. Se trató de un show cautivante donde Hawkins brilló y se llevó una ovación al interpretar "Somebody to Love", de Queen, mientras Dave Grohl tomaba su lugar en la batería.

En más de dos horas en que duró el espectáculo pasaron por el escenario canciones como "Times Like This", "The Pretender", "Learn to Fly", "No Son of Mine", "The Sky Is a Neighborhood" y la cautivante "Shame Shame, entre otras.

Fuente: El Sol