La célebre actriz Olivia de Havilland murió el sábado a los 104 años en su casa de París, en Francia. La noticia fue confirmada este domingo por su antigua abogada Suzelle M. Smith a la revista Variety. "Anoche, el mundo perdió un tesoro internacional, y yo perdí a una amiga y cliente querida. Murió en paz", contó la letrada.

Era la última artista viva del elenco de "Lo que el viento se llevó". Había participado en hitos cinematográficos de los años treinta y cuarenta del siglo pasado, pero este clásico de Holywood en el que protagonizó a Melania, la rival Scarlett O’Hara por el amor de Ashley Wilkes, la hizo saltar a la fama mundial.

Era la hermana de Joan Fontaine, que murió en 2013, una de las musas de Alfred Hitchcock y la protagonista de Rebeca. Según ellas mismas contaron, tenían una relación tormentosa, rodeada de rivalidad y envidias. "Yo me casé primero, gané el Oscar antes que Olivia y, si muero antes que ella, seguramente se indignará porque la gané también en eso", llegó a decir su Joan.

Olivia era hija de dos británicos, pero nació en Tokio, Japón, en 1916, donde su papá, un reconocodo abogado, se había instalado por cuestiones laborales. Gracias a su carrera artística recorrió el mundo y pasó mucho tiempo en los Estados Unidos. Sin embargo, en los setenta se instaló en la capital francesa, ya que consideraba que era el único país que la hacía sentir "verdaderamente en casa".

Fuente: TN