Bonita fue siempre. El tema es que a medida que fueron pasando los años, la "indiecita" comenzó a mostrar más que la belleza con la que abundantemente la dotó Natura y que la puso de patitas en el ambiente. Y si las primeras armas fuertes las mostró cuando debutó en la gran vidriera del Bailando por un Sueño en 2007, las últimas (que vaya a saber si lo son o hay más sorpresas) también. Luego de su primer paso por la pista y de una ausencia marcada por un hecho muy doloroso (un novio que falleció en sus brazos tras una noche de amor, hace un par de años), la muchacha volvió al ruedo y redobló la apuesta. Y, sobre todo, dejó bien clarito que es cabalmente una de las excepciones entre las rubias taradas a las que tan enfáticamente les cantaba Sumo. Con muy buenas condiciones para el baile -la versátil y glamorosa blonda pasa sin escalas ni tropiezos desde un stripdance infartante al cuarteto más folclórico-, una sonrisa que hubiera evitado el naufragio del Titanic y unas curvas delicadas que paralizan a más de uno, ya Flavio Mendoza, Antonio Gasalla, Aníbal Pachano y Carmen Barbieri cayeron rendidos a sus pies y pugnan -por ahora prolijamente- por tenerla en sus filas en la próxima temporada. Pero la angelical muchacha de 29 añitos, nacida en Colombia y argentina por adopción, y amante de las mascotas, todavía está estudiando las ofertas, dispuesta a no dar pasos en falso que la hagan caerse de este escenario que hoy por hoy domina como pez en el agua y que la ha erigido como una de sus grandes promesas.
Por ahora, la hermanita menor y única nena de una familia de futbolistas (de donde heredó el apodo hace varios años) que saltó a la pasarela apenas terminó el secundario de la mano de Pancho Dotto, sigue mostrando sus dones para el ritmo y también apuntalando esa faceta de actriz que además supo despuntar en Europa: trabaja en la tira Sos mi hombre (de la factoría de Adrián Suar, recién estrenada en El Trece) y se prepara para una película cuyos detalles prefiere mantener en reserva… Y, es comprensible, porque con tanta bicha suelta en el ambiente, hay que proteger los proyectos de las malas ondas ¿o no?

