Buenos Aires, 24 de mayo.- Las sorpresas del Bailando 2014 parecen no acabar. Esta vez, Karina Jelinek protagonizó uno de los momentos más fuertes de la noche al besar a Nicolás Magaldi.

Antes del polémico beso, la modelo jugó a ser una muñeca que reaccionaba según el lugar en que la tocaran. Marcelo Tinelli bromeó con ella… y se llevó unos buenos golpes.

"Casi me arranca dos dientes", se quejó el conductor. Pero pocos minutos después el ambiente cambió y la modelo apuntó a Nicolás Magaldi.

"Invitaría a Nicolás a mi casa porque me gusta y estoy sola. ¡Me gusta, eh! Es mini Marcelo… Es muy lindo, muy dulce", dijo la modelo. No se diga más.