El director Roman Polanski se reencontró por primera vez en más de 40 años con la mujer que a la que violó en 1977 cuando ella tenía 13 años, caso por el cual todavía tiene un pedido de extradición en los Estados Unidos, país que no puede pisar. El cruce lo retrataron en una selfie que difundió la esposa del cineasta.

En la foto publicada en Instagram, el realizador de El bebé de Rosemary aparece sonriendo al lado de Samantha Geimer, que lo está abrazando. Según el posteo, la imagen la tomó David Geimer, el esposo de la mujer que denunció el abuso hace 45 años.

“Gracias Samantha”, escribió Emmanuelle Seigner, la esposa de Polanski junto a la instantánea. La frase la terminó con un emoji de un corazón rojo y mencionando a una periodista del medio Le Point.

El encuentro se gestó, justamente, a partir de una charla que coordinó la cronista Peggy Sastre para Le Point entre la actual esposa de Polanski y la mujer que lo acusó en 1977 cuando tenía 13 años y el director 43.

El caso que llevó a Polanski a la Justicia tuvo muchas vueltas. El abuso ocurrió el 10 de marzo de 1977, cuando Samantha Gailey (se llamaba así antes de casarse) fue a una sesión de fotos con el director a la casa que el actor Jack Nicholson le había prestado en Los Ángeles.igner)

El testimonio que quedó certificado ante la Justicia fue que el realizador le dio tranquilizantes y que abusó a la adolescente. Polanski admitió el hecho ante al juez Laurence J. Rittenband, a cambio de que se desestimara un juicio, pero el magistrado se negó a sellar el pacto al que habían llegado las partes.

Es en ese momento donde Polanski arranca un laberinto judicial que sigue hasta hoy: fue preso 42 días en California, luego fue liberado bajo fianza, se escapó a Europa, fue arrestado en un aeropuerto en Suiza en 2009 por el pedido de extradición de los Estados Unidos que, finalmente, no se ejecutó. Esa requisitoria todavía tiene vigencia, a pesar de que las dos partes insisten en que el caso está saldado.

Esto es justamente lo que declaró la mujer afectada en los ‘70 frente a la propia esposa del realizador. “El hecho de que Roman haya sido arrestado de esa manera fue tan injusto. Como la verdad finalmente molesta un poco, todos deberían saber ahora que Roman cumplió su condena”, lanzó Geimer.

Samantha cree que todo el proceso “fue largo” pero llegó a su fin. “Nadie quería eso, pero eso fue lo que pasó y fue más que suficiente. Pagó su deuda con la sociedad. Eso es lo que pasó. Fin de la historia”, expresó.

Geimer sostuvo en la nota que le fue muy difícil hablar con su familia del tema, hasta que todo volvió a aparecer en 2009 cuando arrestaron a Polanski. Luego, fue muy clara con respecto a la opinión que tiene de lo que ella misma fue víctima.

“Nunca fue un gran problema para mí. Ni siquiera sabía que era ilegal, que cualquiera podía meterse en problemas por eso. Siempre estuve bien Todavía estoy bien.¿No puedo estar bien? ¿No podemos estar todos bien? Solo sé que algo sucedió y fue hace mucho tiempo”, enfatizó.