La tela gigante. Con la ayuda de dos grúas, la intervención fue montada en la tarea de ocultar el monumento del Rosetón del Deporte.
 

 

Desde horas tempranas de ayer, dos grúas de gran tamaño se apostaron a cada lado del Rosetón de los Deportes, monumento emblemático del fallecido escultor José Carreri, para dejar caer una gran tela blanca de 300 metros de largo. Pero no fue por un procedimiento de restauración o de mantenimiento. Se trató de una intervención artística de la joven Ana Paula Paz, que realiza su trabajo de investigación para el último año de la carrera de artes visuales. El objetivo es ‘cuestionar el rol de los monumentos de la actualidad y sacar al sanjuanino de lo cotidiano que se encuentre de repente en estos días enajenado con sus responsabilidades y pueda cuestionarse con lo ve, con lo que puede pasarle o no. La idea es provocar, cuestionar y llamar la atención’, dijo la artista. 

La idea de hacerlo visible. La acción estará retratada para una exposición visual.

El objeto de la intervención fue elegido principalmente como ícono de la ciudad de gran tamaño y por la monumentalidad que tiene la escultura. ‘Es un punto clave donde hay mucha circulación de personas. Es muy transitado. En nuestras vidas pasamos y no lo vemos. Modifica el espacio, oculta para señalar, esta técnica sirve para llamar la atención para hacerlo visible. Es parte del arte contemporáneo. Retomo la técnica del artista internacional Cristo, quien cubre sitios y monumentos y revaloriza los objetos. Es la primera vez que se hace en San Juan algo así’, detalló Paz. Esta experiencia quedará publicada en la muestra Dodecaedro que se realizará el 6, 7, 8 de noviembre en la Estación San Martín.
 

Ana Paula Paz, la artista que lleva adelante la intervención.

Fotos: Federico Levato