El martes pasado Coldplay dio el último concierto de su maratón Argentina, monumental, a tono con el lugar que durante diez noches (y hubieran podido ser más) se sacudió con la arrolladora banda liderada por Chris Martin y el fervor de las cientos de miles de personas de distintas generaciones que agotaron todas las fechas. Visita histórica, la bola de nieve inglesa que se ha convertido en la banda que más shows ha hecho en ese lugar en una misma tirada -quitándole el récord que anotó Roger Waters hace una década (con The Wall)- encantó a la multitud que asistió a la estación albiceleste del Music of the Sphares World Tour. Y entre los testigos de esta verdadera locura hubo muchos sanjuaninos, que con más o menos anticipación, con amigos o en familia, se aseguraron sus entradas y contribuyeron a construir este fenómeno. 

Cada uno tiene su propia historia del show y no solo porque -según el día- tuvieran una u otra sorpresa (los que coincidieron con los ex Soda Stereo "flashearon’). Pero hay puntos en los que todos coinciden: la tremenda entrega del vocalista, que no decayó en ningún momento; y el terrible despliegue tecnológico que montaron, incluidas las plataformas cinéticas y las bicis para quienes quisieran subirse y generar energía, a tono con su mensaje ecologista, presente en diferentes detalles. Fueron dos de las cosas más lindas que estos sanjuaninos subrayaron en charla con DIARIO DE CUYO, además de la organización, que se sacó un diez.  

"La previa y pos recital muy ordenados, desde que llegabas para hacer las colas y también adentro, había muchos acomodadores. Realmente impecable’, resumió Amelia Ojeda. 

Los teloneros, otro ítem que mereció elogios, especialmente la veinteañera H.E.R, que acompaña la gira. "Tocó guitarra, teclado, bajo y hasta la batería. Una bestia, genia total!’ anotó Valeria Ruiz, quien, como el resto, también ponderó los "chiches’ que hicieron a la magia del show. 

Las pulseras que cambiaban de colores al compás de la música, un furor. Pocos se resistieron a tomarse una foto con ellas. "Es lo que más nos sorprendió, los juegos de luces de las pulseras’, dijo Gimena Espín. "Le dan una originalidad terrible’, acotó Amelia. "Por ejemplo, en Yellow iban a ritmo variando entre amarillo fuerte y más débil; con Viva la vida, de muchos colores, y cuando cantaron el tema de Soda, se pusieron en celeste y blanco’, contó Ariel Neman, quien comentó que además hubo show de laser, estrellas, mariposas, globos y hasta llamaradas, en sintonía con las canciones. "La verdad que todo sorprende, las pulseras, las luces, el sonido… Es un show de nivel mundial’, acotó Eduardo Barbano, que compró sus tickets en marzo, para estar justo frente al escenario. 

"Todo fue zarpado, pero lo que más me sorprendió fue cuando Chris mostró su tatuaje en el brazo: +Gracias Totales+, fue lo más’, opinó Silvina Ruiz, que como el resto, poco -y  mejor dicho nada- tuvo para criticarle al show en general. Mucho menos a Martín, que se cantó todo, los alegró y emocionó, habló en español y dio muestras de su calidez.  

Sublime. Magnífica. Inigualable. Fantástica. Increíble. Estas fueron las palabras que eligieron los sanjuaninos para sintetizar lo que, en definitiva, fue su experiencia Coldplay.

Ariel Neman y Claudia Elizondo

"Hubo detalles que muestran la calidad de persona de Martin. En un momento salió del escenario principal y cruzó como por un pasillo a un mini escenario en medio de la cancha; y fue chocando manos a todo el público, que se portó recontra bien y la seguridad impecable. Quiso acercarse a la gente y que un ídolo como él haga eso, llega. Si lo querías, después de ver eso lo terminás amando’

 

Silvina, Valeria y Lucas Ruiz Manini y Fabricio Becerra

"La onda de Chris, increíble. Su sencillez y sensibilidad. Su gesto de hablar en español, aunque no fuera perfecto, para que todos pudieran entender. Y cantar un par de canciones en el escenario más pequeño, que estaba más atrás, más cerca de las personas que pagaron menos y que a veces no se tienen en cuenta. El show se hizo corto y eso que no fue nada mezquino’.

 

Eduardo Barbano y sus hijos Augusto e Ignacio

"La energía que se generó era extraordinaria. La vida está hecha de momentos y un show así te llena el alma, emociona. Fue un momento único, de esos que quedan grabados. Estoy feliz de haberlo podido hacer con mis hijos (mi señora no nos pudo acompañar por trabajo). Disfrutamos desde que llegamos hasta que nos vinimos. Así como dice su canción, Viva la vida’. 

 

Amelia Ojeda y Patricia Rodríguez

"Fue un show increíble al que volvería una y mil veces. Más allá de que nunca fui seguidora de la banda y fui para acompañar a mi amiga Patricia, que es fanática, no me arrepiento. Me sorprendieron las plataformas, las pulseras de material reciclado, el aporte que hacen para todo lo de la sustentabilidad y los videos en la previa mostrando lo que hacen por eso con las fundaciones’.

 

 

Gimena Espín y Nicolás Mercado

"Fuimos a la cuarta noche, pero empezamos a vivir esta experiencia mucho antes. Teníamos mucha expectativa, era nuestra primera vez. ¡Nos gustó absolutamente todo! La organización, el lugar y principalmente el show, que fue espectacular, lleno de emociones. La banda todo el tiempo conectada con el público, Chris hablando en español, los efectos, todo. Fue un sueño’.