Al otro lado de mí es la nueva producción engendrada por la Compañía Riveros Luna. La presentación será el próximo viernes 7 de mayo en El Avispero (Entre Ríos 1566 sur, Trinidad) donde se repondrá el sábado 8 y domingo 9.

"Esta obra nace de la necesidad de poder compartir nuestra percepción de cómo podría llegar a ser el preciso instante de la transformación de dos personajes que viven en soledad. Tenemos la necesidad de charlar sobre cómo, a pesar de estar solos, somos modificados y, al mismo tiempo, modificamos a los otros con actos pequeños, sin saber, sin tener conciencia", relató Javier Riveros quien junto a Natalia Luna, dirige el elenco.

Como el desafío creativo Nro. 20, "Al otro lado…" aumenta el nivel de dificultades que se impuso el grupo desde su formación ya que, en este proceso, el espectador tendrá la opción de participar. El público tendrá, en sus butacas, cartas con números del 1 al 10 por los que deberán optar y los intérpretes tendrán en su bolsillo un sobre con una cifra que descubrirán posteriormente.

"Estarán todos los integrantes dispuestos para ser elegidos por la gente, será una forma de experimentar un estado de incertidumbre que creemos que aportará mucho al desarrollo y al trabajo interpretativo", afirmó Riveros sobre la creación que, aunque pondrá a dos personajes, contará con 10 artistas que conocerán el trabajo a desarrollar. 

La puesta se construyó en pandemia con "todas las dificultades que eso lleva", explicó el coreógrafo. Los bailarines comenzaron con los ensayos presenciales hace 2 meses, con la utilización de "conceptos de cine, de directores como Andréi Tarkovski y Leonardo Favio; y recursos literarios como en El Quijote", agregó el hacedor.

"’Al otro lado de mí’, porque a muchos de los instantes que pasamos en el día (y, si se quiere, en la vida) quien los provoca está al otro lado", señaló Riveros acerca de la flamante labor de la formación que también subió Lo que te quiero, seleccionado para ser parte del Regional de Teatro de este año. "Siempre pasamos por momentos de tensión al exponer un trabajo. Ahora, estamos muy ansiosos, nerviosos… entendemos que vamos a entregar una gran parte de nosotros. Presentar una nueva obra nos llena de sensaciones encontradas, nos involucramos tanto que son momentos muy difíciles de explicar. Está por nacer nuestra criatura", concluyó el responsable de la agrupación que en la Teatrina se consagró en 4 de las 5 oportunidades en las que compitió; así como fue finalista en 5 ediciones del Certamen para Nuevos Valores Precosquín donde, en 2019, ganó por mejor vestuario con la obra El último gaucho y en el 2020 recibió la distinción a mejor puesta en escena, con Deolinda según Baudilio.