En una familia como querríamos que fueran todas, hay padres, abuelos, hijos, primos, sobrinos, etc. Esta familia de la Orquesta Sinfónica de San Juan celebró sus primeros 40 años. Y después de la presentación de Nina Galván y de un video fuimos conociendo a algunos de sus miembros de "la primera hora", de otros que ya no están y de muchos que son la familia de ahora! Para la Biblia el Nº 40 es una manera de designar un período de tiempo relativamente largo de la existencia humana; es el símbolo de una generación. El hombre era plenamente adulto y ya maduro a esa edad y además es el tiempo que pasó Israel en el desierto conducido por Moisés para "formarse" como pueblo y no como un grupo de gente que ese escapaba de Egipto. Este viernes, nuestra Orquesta celebró el cumplimiento de su primera "Generación". Para el Salmo 90, los hombres más vigorosos duplican los 40. Quizá no sea casual que el "Moisés" que comenzó a conducirla esté a pocos días de cumplir…¿87? El Maestro Jorge Fontenla. El concierto comenzó con una obra suya: "Toccata para orquesta" Op. 40, hermosa obra "pan-tonal" (palabras de su autor!) que para mis simples oídos eran una delicada combinación de un impresionismo francés con sonidos porteños, especialmente en las intervenciones casi solistas del concertino. Me he enterado que William Harvey está aprendiendo -o intentando aprender- a bailar tango. Claro que no es un "impresionismo" de Debussy, ni tiene porqué serlo. Apenas iniciada, la percusión sostenida por las cuerdas graves en suavísimo pizzicato de las cuerdas (pizzicare: pellizcar, o sea cuando las cuerdas no usan el arco sino que "pellizcan" a las cuerdas con los dedos) eran un placer. ¡Qué linda música! Y aunque usted como autor tiene todo su derecho de que le pareciera larga, a nadie le pareció así.
Lo segundo fue el romanticismo puro de F. Chopin (1810-1849). Como su padre, Nicolás era francés -enseñaba su idioma a los hijos del Conde Skarbek- y se casó en Polonia, su hijo "Fryderyk" fue el varón entre 3 hermanas. El apellido era francés pero los polacos lo pronuncian "Chópin", o sea lo "polaquizan" (después de todo, convengamos que los franceses tienden a "afrancesar" cualquier apellido que no sea galo). Otra comparación "bíblica": El capítulo 2 del Génesis fue escrito varios siglos antes que el capítulo 1!! Así también, el Concierto Nº 2 en fa menor que escuchamos bellamente interpretado por el joven quiteño Andrés Torres fue compuesto antes del conocido como Nº 1 en mi menor. Se inició a fines de 1829 con un Chopin de 19 años y se estrenó en marzo del 1830 mientras que el Nº 1 se estrenó ya en Francia -donde pronunciaban bien su nombre!- recién en 1837, pero había sido compuesto en el mismo año 1830.
Las cuerdas inician un maestoso (majestuosom") y después de una amplia actuación de la orquesta entra el solista. Pero no nos engañemos, Chopin no compuso Sinfonías ni óperas -aunque sí "Variaciones a temas operísticos" -; era fundamentalmente un pianista; así que después de dejarle un buen tiempo a la orquesta, el piano dice, al principio tímidamente, "Aquí estoy….y a partir de ahora yo los guío"!! Sigue un larguetto (o sea un "poquito largo" y por largo se entiende "despacio"). El concierto fue dedicado a la Condesa Delphine Potocka con quien mantuvo abundante correspondencia, pero estrictamente sobre temas musicales y filosóficos. En cambio había otra joven; Constancia Gladowska de quien estaba "secretamente" enamorado. Ella parece ser la causa por la que éste "larguetto" suene tan romántico! Es un Chopin enamorado (aunque no correspondido). Quizá por eso el Maestro Siffert, el solista Andrés Torres y la Orquesta nos lo volvieron a regalar como "Bis" , fuera de programa.
El allegro vivace (alegre y vivaz) lleno de energía es un rondó (o sea una ronda o círculo de una melodía recurrente a intervalos). El segundo tema es una mazurca o danza folklórica polaca (Chopin viajaría ese mismo año fuera de su patria para no volver jamás. Pero desde París sería el más polaco de todos). El corno hace un llamado y el movimiento termina con un veloz motto perpetuo ( movimiento constante).
Una orquesta o un coro es pues un conjunto de personas unidas en pos de un amor común, por dejarse enamorar de la belleza del sonido y poder transmitirla a los demás. Permítanme otras dos frases que resumen toda la Biblia: "Escucha Israel"… y… "Quien tenga oídos para oír, que oiga"!!
Pero el arte comunicativo es un porcentaje de "inspiración" y otro mucho mayor de "transpiración". ¡Cuántas horas diarias y años de ejercicio y práctica para poder aclimatarse a su instrumento! ¡Qué pena que no hayan podido tener su último ensayo por haber dispuesto el uso de esa sala pensada para música y única en el país para otros fines que no son musicales ni requieren de una acústica sin micrófonos. ¡¡Qué consolador en cambio y qué ejemplo de "padre de familia" el del Maestro Jorge Fontenla cuando escribe su Toccata teniendo en la cabeza y en el corazón a cada uno de sus músicos concretos, su concertino con nombre y apellido y así sucesivamente y nos dice con absoluta sinceridad que en tantos años de trabajo no ha hecho más que cumplir con su deber!!
Y la primera fila -reservada para las Autoridades-… vacía. Para muchos parece que la música no es importante. Pero todo diálogo comienza… escuchando. ¡Felices Cuarenta!