FOTO MAXI HUYEMA

Berta Kleingut de Abner es una referente de las letras sanjuaninas y es la autora junto a María Elvira Quiroga de Nollen de un libro que esta tarde tendrá su presentación oficial en el Museo de la Historia Urbana. Un intercambio de mails en tono de humor y en formato de versos propiciado por la Magister en Letras y Doctora en Letras a modo de "juego', durante el confinamiento más estricto de la pandemia; se convirtió en el prefacio de Payandemias, la flamante publicación que cuenta con ilustraciones de Ana Bustelo y se editó con la editorial autogestiva local El Andamio. 


Cuando los espacios dedicados a la actividad cultural y artística debieron cerrar sus puertas por el avance del covid-19, la reconocida conductora del taller Leer Juntos -curso que nació en la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes de la UNSJ mientras ella estaba en la docencia y en el último tiempo en la sede de la Alianza Francesa- pasó a enviar comentarios a sus alumnos vía correo electrónico. Una de ellas es María Elvira, seguidora de sus cursos desde hace 2 décadas, que encantada por el privilegio de recibir sus textos, aceptó este recreo para el alma que Berta promovió para transitar la crisis sanitaria del 2020.


De este modo, la invitación nació mediante versos octosílabos que afloraron de manera "inesperada', como recordó Berta, respecto a las epístolas que salían de su casilla para palear los efectos de una época triste y solitaria. 


"No podía resignarme a sucumbir al contacto con las personas. Entonces, tratando de mantener el vínculo, les envié mails para llevar más liviano lo que estaba ocurriendo y María Elvira respondía con una energía que me obligaba a escribirle. Para ese diálogo asumimos los seudónimos de Mafalda, con el que la bauticé en homenaje al personaje de Fontanarrosa por esa combinación de agudeza intelectual e ingenuidad de sus versos; y de Ágata, que me adjudiqué en admiración a Agatha Christie, la escritora de novelas policiales que admiro desde mi adolescencia y consumíamos junto a mi marido", explicó la notable profesora de Lengua y Literatura, pionera de la investigación teatral, que se encuentra próxima a cumplir 92 años y en 1959 llegó de Buenos Aires a San Juan para radicarse y criar a sus hijos junto a su marido.


"Yo la sigo a Berta hace dos décadas. Cuando comenzó a enviarnos comentarios en la cuarentena yo, por supuesto, le empecé a contestar. Así, me envió una invitación al juego de escribirnos en verso. El intercambio siguió en otoño, invierno, primavera y verano hasta diciembre", agregó por su lado la abogada de 78 años sobre la relación que forjó con su "mentora' a través de mails, desde marzo de 2020.


"Yo le dije que lo hiciéramos no como la profesora y la alumna, sino como dos vecinas para darnos ánimo una a la otra", agregó esta personalidad de la cultura local con una lucidez extraordinaria, para quien el tema subyacente en estas páginas siempre es "la soledad'.


Y las noches de insomnio y temor a consecuencia del oscuro panorama mundial debido al brote de coronavirus, se transformaron mágicamente, a la hora de sumergirse en su propio mundo para dejar volar a sus musas y alejarse de "la pesadilla' que se vivió en aquellos tiempos de incertidumbre.


"Escribimos sobre lo que surgía en la comunidad, lo que veíamos, sentíamos y nos ocurría como el pedalear en bicicleta mirando la televisión, la escucha de un concierto, el cambio de la ropa de verano por la de abrigo y la imaginación de un viaje. También nos contábamos historias de nuestras familias. Yo escribía versos a mano alzada", mencionó Quiroga sobre lo que se convirtió en motor de las rimas. 


"Ahora, interpretamos todo aquello como un salvataje". "Fue un juego que se convirtió en libro, un sueño. Agradecemos a Marcela Mancini quien fue nuestra paloma mensajera, porque iba y venía para ayudarnos al igual que Izasa, que nos ayudó mucho', reflexionaron ambas sobre lo que comenzó a trabajarse en 2021 después que Daniel Izasa, director de la Alianza Francesa de San Juan, impulsó su encuentro físico para realizar un audiovisual en el marco de la celebración del Día del Libro a través de las redes de la Alianza. Es esa reunión la que sirvió de puntapié para la gestación del volumen. 


"Estoy algo ansiosa porque siempre está el tema de la aceptación del lector. Esto es una sorpresa que nos abruma. Nos llegaron comentarios de que es atrapante y atractivo. Es una fantasía bien vivida en una época que transitamos con nuestros hijos muy lejos', subrayó quien tiene a su hija Fátima Nollen en Londres donde se radicó con su esposo y su hijo.


"Nos hizo tanto bien, fue tan saludable sentir ese afecto que brotaba de la energía que poníamos en responder', manifestó Berta que tiene a su hijo Jorge Alejando en la provincia junto a los hijos de él: Mariano, Nicolás que se encuentra en Israel, y Wanda que está eventualmente en la provincia-; y Claudio Daniel quien la visita desde Madrid y tiene a la pequeña Brenda.


En definitiva, "Payandemias', título que resultó del ingenio de Berta que conjugó los términos de payadas y pandemia, es un testimonio atravesado por las emociones de dos almas que dicen plantarse juntas frente a nostalgia y a las adversidades con creatividad y picardía, para sostenerse "mutuamente', como Ágata y Mafalda. 

DATO

La presentación es hoy a las 19 en el Museo de la Historia Urbana (Av. 25 de Mayo 1128 oeste) con el Dr. Mariel Erostarbe y la conducción de Nina Galván


PARTE DEL INTERCAMBIO

Muy ponderada y muy bien,
Mafalda Elvira Nollen:
Te he invitado a jugar
-Merecida la propuesta-
pues comprendiste al instante
que había posado el guante
y esperaba tu respuesta.
A mi me encanta jugar,
un poco el yugo olvidar
con diálogo de juglar
cuando el interlocutor
presto pone el otro guante
y el juego sigue adelante
ofreciendo su primor.
Entonces, cara Mafalda
si ya te encontrarás dispuesta,
con suficiente locura,
espero que antes del alba
Imagines tu promesa.
que la palabra oportuna
música es, todo lo cura. Ágata madruga


¡Me invitaron a jugar!
Qué distinguida propuesta.
¿Qué capacidad yo tengo
de lograr buena contesta?

Aunque no me sienta digna,
el encierro nos iguala
y por eso, sin sofoco,
digo que sí a la oferta.

Previamente a continuar
con este juego sagrado,
mis manos tienen un texto
que bien puede ser legado.

De Víctor Hugo se trata,
de ti lo he recibido.
Y ese mensaje trae
mis anhelos más queridos.
Inspirada Jugaré
con locuras y alegrías...
Porque propuesta amaré
que mejore mi estadía.
Así que siendo la vida
un camino tenebroso,
de repente se transforma
en gala de mucho gozo

¡Vamos, Ágata querida!
¡Sigamos en compañía
en este juego sublime
entre vecinas y amigas!
Mafalda siempre dispuesta