No Te Va Gustar dio una propuesta renovada y bien 'desenchufada' con el lado B de canciones y reversiones interesantes.

¡Buenas noches San Juan!, gritó fuerte Emiliano Brancciari después de abrir el recital de NTVG -con la canción Solo (Aunque cueste ver el sol)- anoche ante una sala colmada de seguidores. El Teatro del Bicentenario fue el escenario perfecto para recibir a la banda uruguaya que, con una propuesta distinta y desenchufada, celebró sus 25 años de trayectoria. El encuentro fue todo un viaje acústico por la nostalgia, los recuerdos y las historias que encierran cada canción, cada disco y cada vivencia que tuvo el grupo a lo largo de dos décadas y media. A diferencia de sus habituales recitales, esta presentación fue especial, apelando mucho a los sentimientos y a crear atmósferas de intimidad y de estar en un cara a cara con una platea entusiasta. Efectivamente, la bienvenida fue acompañada de aplausos y gritos de fervor por la franja femenina de la plata: 'Que felicidad volver y mucho más a este lugar maravilloso, con un espectáculo nuevo. Cumplimos los 25 años de la banda, estamos repasando las canciones en un formato diferente y con temas que generalmente en los shows eléctricos no tienen lugar. Éste es el espacio indicado, ojalá que pasemos una gran noche, como cada vez que venimos a San Juan y ojalá que se vayan más felices de como entraron', dijo el vocalista. Y lo que prometió en el comienzo del show, se cumplió.

Emiliano Brancciari se sintió muy cómodo con el espacio y el escenario del Teatro del Bicentenario.

En el desarrollo del recital, se notó todo un trabajo sonoro, cuidado y estudiado hasta el más mínimo detalle a la hora de ofrecer reversiones de temas como 'Al vacío', 'Verte reír', 'Mi demente', 'Tan lejos' y 'Tirano' por citar algunas joyas. Fue una propuesta interesante, porque le sirvió al público hacer coros y palmas al son de una mixtura de ritmos como el candombe, el country, la ranchera, el pop y la balada. Escucharlos de otra manera, permitía también encontrar costados tal vez poco explorados hasta ahora.

El show acústico transitó por la nostalgia y las historias de muchas canciones en la extensa carrera de la banda uruguaya.
(FOTOS MARCOS URISA)

Además, las melodías se complementaban muy bien con los juegos de luces, dando una ambientación cálida y sobrecogedora. Uno de los platos fuertes, fue sin duda, uno de sus recientes hits 'Los Villanos', del disco Suenan las alarmas (2017), en el cual, el público se expresó con mucha euforia al entonar las estrofas del tema. El final fue un poco más eléctrico, subiendo el ritmo con 'Chau' y 'Cero a la izquierda'. Los fans festejaron las bodas de plata de NTVG con intensas emociones.