“Sociólogo, publicitario, consultor y articulista, pero autodefinido principalmente como hijo, hermano, padre y esposo”, Fernando Miodosky presentó recientemente una novela que articula todas sus facetas, pero que busca, en esencia, dejar testimonio de un pasaje decisivo de su historia: el de la familia Miodosky-Ukrainczyk. Se llama Mandato Clandestino y está basada en hechos reales. Una suerte de “biografía no autorizada” que entrelaza la realidad con la ficción, que cuenta los orígenes de un apellido muy conocido en San Juan y que justamente tiene a la provincia como escenario clave.

A partir de la convulsionada Polonia de 1920, se centra en una viuda y sus siete hijos, quienes se ven forzados a huir al otro lado del océano ante la persecución antisemita. Necesitaron separarse para poder escapar, sin saber si iban a poder reencontrarse alguna vez. Mutilados como familia, uno a uno, fueron intentando alternativas para huir. En Argentina y más precisamente en San Juan, encontraron ese resguardo.

Parte el primer hijo, sale en barco desde Francia y en 1925 llega a Buenos Aires. La típica, al hotel de inmigrantes, sin saber el idioma, sin nada. Con esa dificultad, el último día que le quedaba en el hotel se va a la terminal de trenes y toma el último tren. Ese tren iba a San Juan. Fue todo fortuito, y al final terminó en Angaco. Ahí comienza todo un proceso, porque eran siete, más la madre viuda que había quedado. Fueron llegando uno a uno, pasaron trece años hasta que se reencontraron todos”, contó a DIARIO DE CUYO Miodosky, descendiente de esos inmigrantes, quien vivió hasta los cuatro años en San Juan y que tras un tiempo en Neuquén, se radicó en Buenos Aires.

Mi abuelo es el segundo hermano de los que viene. Su tío es el que, de alguna manera, le ayuda a su madre viuda. Ese tío -que al final es llevado a un campo de concentración, del que escapa, pero su familia muere- es el que presta los documentos para que el primero de los hermanos pueda irse a Argentina”, relató.

Según Fernando, San Juan tiene un lugar relevante en su historia, “porque fue la cuna más grande de la familia, o sea, el mayor contingente de ‘Miodoskys’ está en San Juan, escritos de distintas maneras, porque siempre pasaba que, en cualquier ingreso, se inventaba una nueva forma de escribir el apellido”, explicó, no sin detenerse en una anécdota más que interesante.

El apellido real era Ukrainczik, pero como se fueron con pasaportes falsos para poder escapar de ser incorporados al servicio militar e ir a la guerra, en vez de venir como Ukrainczik fue como Miodosky. Entre nosotros los llamamos ‘los Miodosky falsos’, yo soy de esos, aunque ya después de tanto tiempo todos nos sentimos Miodosky”, relató con una sonrisa.

 

fernando-escritor-2-485x728
“Mandato Clandestino”, de Fernando Miodosky (Editorial Dunken), fue presentado en la Feria Internacional del Libro de Neuquén y en la AMIA. Las ganancias obtenidas por la venta del libro son donadas a proyectos sociales y culturales de AMIA.

 

¿Por qué escribir esta historia? Fernando, que la presentó en la AMIA -de hecho, todo lo recaudado será donado a proyectos culturales y sociales de la institución- lo comparte.

“Siempre fuimos muy de guardar los relatos, quizás porque tenían un valor muy preciado. Lo que les pasó a todos aquellos que vinieron de Polonia es que en algún momento cerraron la puerta, no quisieron contar más nada porque para ellos era como revivirlo, entonces el relato pasó a ser un bien preciado”, dijo. “Yo guardé esos relatos familiares, los acopié en algún lado. Después, con la pandemia, que también fue una instancia de introspección, fui compilando, ordenando todos esos relatos. Pero también tuvo que ver con que falleciera mi papá… Para mí, esta novela, de alguna manera, honra un poco su vida. La verdad que fue una multiplicidad de factores que me llevan a reconstruir esa historia, también estuve en Polonia… Creo que la novela se empezó a escribir mucho antes de sentarme a la máquina, muchísimo antes”, completó su propia motivación el escritor sanjuanino, para quien también hay otra lectura entre esas líneas.

“El libro se llama Mandato clandestino y hace una revisión de esa idea, porque hoy en la sociedad estamos como peleados con los mandatos ancestrales, como que de golpe tenemos que reinventar todo y en realidad, si bien obviamente hay muchos que replantear, también hay mandatos que terminan siendo la brújula en momentos críticos. Esta valoración del trabajo, el esfuerzo de la familia, de cuidarse uno al otro, que son valores muy potentes que vienen en esa trama de mandatos ancestrales que uno va cargando de alguna manera, culturalmente”, valoró el autor, deseoso de que su historia también haga nido en el San Juan de sus raíces.