China, 19 de abril.- El agente intentó detenerlo trepándose al capó del vehículo, pero esto no hizo más que enardecer al conductor, que de todos modos arrancó y se lo llevó a la rastra.

Tras una nueva detención, incluso agredió al policía tratando de quitarlo del capó, para volver a subirse al automóvil y repetir la increíble escena, atravesando una avenida con el agente acostado sobre la parte delantera.

Finalmente, según el reporte de Russia Today, el taxi era “pirata”, y lo que el conductor quería evitar era que el policía le pidiera su licencia, ya que el vehículo no tenía permiso alguno para trabajar como transporte público.