Brasil, 23 de enero.- “Mi nombre de mujer es Laleska , sólo de noche, cuando salgo a bailar en mi ciudad, Beberibe”, en el estado de Ceara, confesó Valerio Fernandes Gama, de 32 años, referí en la división profesional del Campeonato Cearense, en el nordeste del país.

“Me respetan como si fuera una mujer, en el fútbol nunca sufrí discriminación o prejuicios” aseguró el arbitro que negó haber sido discriminado por su condición homosexual y se animó a contar su historia a la edición online del diario “Folha de Sao Paulo”.

Los jugadores del club Ferroviario lo descubrieron y reconocieron en un boliche , pero lejos de la reacción que esperaba, los jugadores lo felicitaron por el coraje que tiene para ser juez de fútbol profesional.

“Es gracioso porque cuando los futbolistas saben quien soy nunca me gritan, como a los otros referis, “maricón”, sino que apenas me dicen ladrón cuando señalo algo que no les gusta”, y agregó que muchos jugadores, cuando no lo conocen, le dicen “señora”, por su apariencia femenina.