La cifra de muertos por un fuerte terremoto en el sudoeste de Pakistán aumentó a 327 ayer debido al derrumbe de cientos de casas de adobe sobre sus ocupantes en un área remota cerca de la frontera con Irán. El terremoto del martes, de magnitud 7,7 en la escala de Richter, sacudió principalmente a la provincia de Baluchistán.